El gobierno mexicano debe realizar una investigación rigurosa, oportuna, exhaustiva e imparcial sobre las circunstancias en las que murieron 43 personas, 42 supuestos delincuentes y un policía federal, el viernes pasado en Tanhuato, Michoacán, señaló este jueves Human Rights Watch (HRW).
"Debido a los pésimos antecedentes en materia de derechos humanos de las fuerzas de seguridad mexicanas, es crucial que se lleve a cabo una investigación rigurosa y transparente para determinar si efectivamente el empleo de la fuerza fue proporcional durante el enfrentamiento y si se produjeron ejecuciones extrajudiciales", dijo Daniel Wilkinson, director gerente para las Américas de HRW.
Según Monte Alejandro Rubido, comisionado nacional de Seguridad, el operativo en Tanhuato que derivó en el enfrentamiento —que se prolongó de manera intermitente durante unas tres horas— comenzó tras una denuncia de "invasión" de un predio, que llevó a las fuerzas federales a acudir a esa propiedad.
Luego que medios y analistas compararan el hecho con lo sucedido en Tlatlaya, Estado de México, el comisionado de la Policía Federal, Enrique Galindo Ceballos, .
"Definitivamente no tenemos ninguna aproximación a lo que haya sucedido en Tlatlaya. Aquí hubo un enfrentamiento demostrado... No hay ninguna ejecución después del enfrentamiento", dijo Galindo en entrevista telefónica con Ciro Gómez Leyva en Grupo Fórmula, este lunes.
"Para no repetir el fiasco de la investigación sobre el caso Tlatlaya, la procuradora general de la República (Arely Gómez) debería convocar inmediatamente a expertos forenses independientes y rigurosos que puedan otorgarle credibilidad a su investigación sobre los asesinatos", dijo Wilkinson este jueves.
Junto con otras organizaciones internacionales y gobiernos extranjeros, HRW ha cuestionado la situación de los derechos humanos en México por temas como la desaparición de personas, la tortura y el uso de la fuerza de parte de las fuerzas de seguridad.
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