¿Eres un blanco fácil para el robo de identidad? Descúbrelo

¿Cuándo fue la última vez que te viste tentado a dar clic a ese correo que decía que habías ganado un viaje? ¡Cuidado! Esta es una de las tácticas que usan los estafadores para acceder a tu información y robar tu identidad, lo que puede afectar tu reputación o tus finanzas.

La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) advierte que este delito va al alza, pues tan sólo en los tres primeros meses del año el sector bancario recibió 19,000 reclamaciones por posible robo de identidad, 18% más que en el mismo periodo de 2016.

Frente a esto, aquí te damos una guía para no caer en la trampa, a partir de las recomendaciones de autoridades y expertos.

1. ¿Qué es el robo de identidad?

Es la apropiación de la identidad de una persona, con el fin de hacerse pasar por ella frente a terceros, públicos o privados, y así obtener recursos o beneficios a su nombre, o bien, transgredir su reputación. Quien lo comete obtiene y hace un uso no autorizado e ilegal de datos personales.

Con el robo de identidad se puede contratar créditos o servicios a nombre de otro, hacer compras, realizar operaciones inmobiliarias, intervenir en cuentas bancarias, publicar mensajes o enviar información a listas de contactos.

2. Las tácticas más comunes

Algunas de ellas no necesitan internet. Estas son las llamadas tácticas de ingeniería social y recurren a la obtención de datos por medio del engaño y la manipulación.

Una es el pretexting, en la que el atacante tiene un estudio previo de la víctima y encuentra un momento vulnerable para persuadirla de dar información sin que se dé cuenta. Otra es la extorsión telefónica, que es cuando el estafador se hace pasar por alguien más para obtener datos.

Además, los atacantes también pueden auxiliarse de herramientas propias del espionaje. Una variante es el shoulder surfing, que es cuando los estafadores observan de cerca a su víctima para obtener números PIN o códigos de seguridad.

Otra táctica es la búsqueda de documentos personales tirados a la basura. Esto se conoce como dumpster diving y tiene otra variante: el 'asalto' a un buzón para robar correspondencia, lo que en sí mismo constituye un delito.

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Otras tres formas de robo de identidad fuera de la red son el skimmig o clonación de tarjetas de crédito o débito; el vishing, que es cuando el estafador pretende ser miembro de algún corporativo y pide a la víctima que “verifique” información por teléfono, y el SMiShing, que consiste en el envío de mensajes SMS con el fin de forzar visitas a una página fraudulenta.

Dentro de internet, las cinco tácticas más utilizadas son el spam y el SPim, que funcionan de manera parecida con correos o avisos publicitarios engañosos para acceder a tu información; el registro de pulsaciones, el cual identifica las teclas que pulsas al momento de estar navegando o haciendo compras en línea; el phishing, o suplantación de identidad, y el pharming, que al igual que el spam busca que las víctimas accedan a páginas fraudulentas con mensajes atractivos (como la obtención de un premio) o de alarma (con avisos falsos de supuestas páginas oficiales).

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3. Descubre tu nivel de riesgo

Ante el aumento de casos, el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (Inai) habilitó una herramienta mediante la cual las personas pueden conocer qué tan vulnerables o expuestas están a la usurpación o robo de identidad, el llamado “Vulnerómetro”.

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A través de un cuestionario sobre tus hábitos, disponible en la dirección http://micrositios.inai.org.mx/vulnerometro/ , la aplicación determina qué tan vulnerable eres y el riesgo que tienes de ser víctima de este delito.

4. ¿Qué hacer si crees haber sido víctima?

Generalmente no te das cuenta hasta que te llaman empleados de despachos de cobranza por deudas que nunca adquiriste, recibes tarjetas de crédito que no solicitaste, rechazan tus tarjetas o te llega información de compras que no realizaste.

Si te ha pasado algo parecido, denuncia ante las autoridades correspondientes y reporta la pérdida de tus documentos. Además, contacta a las instituciones bancarias para aclarar tu situación financiera, acude a la Condusef para presentar una queja formal y cancela las compras o los servicios no autorizados.

5. Recomendaciones

El Inai contempla algunas medidas de protección, tales como mantener seguros tus documentos personales, archivos electrónicos o contraseñas, tanto en casa como cuando cuando salgas de viaje; destruir tus documentos personales cuando hayan dejado de ser necesarios; pensar antes de publicar o compartir información personal en redes sociales y configurar adecuadamente los niveles de privacidad; proteger tu computadora, smarthphone y tablet, y limitar el número de documentos personales que habitualmente traes contigo.

Además, se sugiere que tengas cuidado cuando te soliciten información en persona, por internet o por teléfono; investigar si recibes tarjetas, servicios o artículos que no hayas solicitado; mantenerte alerta ante cualquier transacción bancaria inusual; procurar tener siempre a la vista tu tarjeta de crédito o débito cuando pagues en establecimientos, y realizar transacciones mediante prácticas seguras, por ejemplo, evitando hacer compras desde un café internet.