CIUDAD DE MÉXICO- Durante seis años, tres mexicanos acusados de narcotráfico esperaban la pena de muerte en una cárcel de Malasia, pero el gobierno de ese país les otorgó el perdón.
En un comunicado, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) informó que, después de múltiples esfuerzos diplomáticos, se logró conmutar la pena de muerte a la que habían sido sentenciados por cadena perpetua.
Los mexicanos acusados son los hermanos Simón, Luis Alfonso, y José Regino González Villarreal, originarios de Sinaloa y quienes fueron detenidos por la Policía Real de Malasia el 4 de marzo de 2008 en el estado de Johor, en aquel país.
En 2012, los tres sinaloenses fueron sentenciados a pena de muerte al ser hallados culpables del delito de narcotráfico.