Triste 10 de mayo para restauranteros
Los restaurantes de la Ciudad de México no podrán solventar las pérdidas económicas ocasionadas por el paro de labores ante el virus de la influenza humana -de más de una semana-, ni con el mejor día de ventas para este sector, el festejo del Día de las Madres. Unos días después de que se decretara la alerta por el virus de influenza H1N1 (23 de abril), las autoridades del Distrito Federal decretaron el cierre de los establecimientos de comida, exceptuando las ventas a domicilio.
Esto ocasionó pérdidas para el sector de alrededor de 1,200 millones de pesos en sus ventas, según la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac).
"En un 10 de mayo normal las ventas en el Distrito Federal son de 350 millones de pesos en promedio. Nosotros podemos calcular, porque también la situación económica no es tan boyante, que podríamos hablar de un 75% menos comparado con 2008", dijo en entrevista el presidente de la Canirac, Francisco Mijares.
El directivo calcula que los ingresos podrían rondar entre los 87.5 millones de pesos para ese día.
"Ahora desgraciadamente tendremos nuestros negocios al 50%", agregó.
Desde este miércoles los restaurantes de la Ciudad de México abrieron sus puertas a los millones de capitalinos, aunque sólo al 50% de su ocupación, según las disposiciones acordadas con el Gobierno local.
Anteriormente se había convenido que los restaurantes permitieran que al menos 4 clientes ocuparan un espacio de 10 metros cuadrados y que la distancia entre sillas fuera de 2.25 metros.
"Pero tenemos la ventaja que como cae en domingo (10 de mayo), se puede aprovechar que la gente vaya festejar a su mamá en sábado y otros en domingo", previó Mijares.
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A su vez, estos negocios deberán cumplir con una serie de medidas higiénicas para poder operar libres de contagios del virus de la influenza humana.
Este miércoles las autoridades sanitarias mexicanas dijeron que el número de muertos por el virus se elevó a 42, desde las 29 personas reportadas apenas el martes.
La cifra se elevó por la aceleración del número de pruebas realizadas a muestras de casos acumulados.
La Canirac aglutina a unos 35,000 negocios en la capital mexicana, donde alrededor del 95% son pequeñas y medianas empresas, que alimentan al 80% de la gente.
Sin embargo, el líder de los restauranteros prevé que la próxima semana pueda tener una perspectiva de cuántas empresas abrieron y si tuvieron que realizar recortes de personal para sortear estos problemas.
