La cementera suiza Holcim dijo el viernes que la compensación ofrecida por la nacionalización de su filial en Venezuela no es aceptable, y que continuará con el proceso de arbitraje que inició en marzo.
Venezuela dijo en la víspera que aprobó 378 millones de dólares para pagar una primera parte, correspondiente al 40%, de las estatizaciones ordenadas el año pasado sobre las unidades locales de Holcim y la francesa Lafarge.
"A la fecha Holcim no ha recibido una oferta de compensación de la República de Venezuela que sea aceptable desde un punto de vista legal o financiero", dijo la firma.
La empresa agregó que no detendrá el proceso de arbitraje presentando ante el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (CIADI), dependiente del Banco Mundial.
"En el procedimiento, el grupo busca una compensación total por la expropiación de su antigua unidad, Holcim Venezuela, por parte del Gobierno", agregó.
El año pasado, el Gobierno dijo que había acordado pagar 267 millones de dólares por la unidad local de Lafarge y 552 millones por el 85% de la unidad de Holcim, en manos de su casa matriz.
El ministro de Obras Públicas y Vivienda, Diosdado Cabello, dijo en la víspera que luego del primer pago a las cementeras, el monto restante podía ser pagado en cuatro años sin intereses.