El caso de bancarrota de CIT Group Inc fue asignado el lunes al juez estadounidense de quiebras Robert Gerber, el mismo que supervisó la reciente bancarrota de la automotriz General Motors Co.
Gerber, juez de quiebras desde el 2000, ya se ha enfrentado a casos complejos, dado que también ha lidiado con la bancarrota del operador de cable Adelphia Communications Corp y actualmente lleva adelante el proceso de Lyondell Chemical Co.
La reorganización de GM llevó alrededor de seis semanas, lo que muestra que hasta en las compañías más grandes es posible realizar el proceso rápidamente si los acreedores y las partes se reúnen de antemano.
CIT, una fuente de financiación de alrededor de 1 millón de pequeñas y medianas empresas, aplicó el domingo a la protección por bancarrota del Capítulo 11, luego de conseguir el apoyo de la mayoría de sus tenedores de bonos para su reorganización "pre-empaquetada".
La compañía espera salir de la quiebra para fines de año y reducir su deuda en 10,000 millones de dólares. También pretende seguir haciendo préstamos y una rápida recuperación es crucial para conservar la mayoría de sus clientes.
De acuerdo con su petición de bancarrota, CIT tenía 71,000 millones de dólares de activos y 64,900 millones de dólares de pasivos al 30 de junio.
Será una de las cinco mayores bancarrotas del país en términos de activos.
Por la mañana, los papeles de CIT descendían 41 centavos, o un 57%, a 31 centavos. La Bolsa de Nueva York dijo que suspendería la cotización de CIT antes de la apertura del martes.