Apple supera en una cosa a todos sus competidores: sabe cómo anunciarse en televisión.
Microsoft nunca se recuperó del todo de la paliza que recibió de la campaña publicitaria "
" (una serie de anuncios protagonizada por Justin Long y John Hodgman). Mientras que Google sigue tratando de igualar la campaña " ".¿Y cómo responderán a la más reciente publicidad de Apple, en la que un iPhone 4 usa la función de video-chat FaceTime para tocar los corazones de los espectadores?
El primer anuncio de un minuto, obra maestra de la manipulación emocional que equivocadamente se le atribuyó a Sam Mendes (director de la cinta "American Beauty"), salió al aire el mes pasado. El analista Edmund Lee de Advertising Age dijo que era elegante y dejaba sin palabras.
Otros cuatro nuevos anuncios debutaron el domingo por la noche, y recurren a la misma estrategia, explotar el impacto emocional de una sonrisa (con frenos en los dientes), un radical corte de pelo, el nacimiento del primer nieto y un embarazo por largo tiempo buscado.