Durante la presente administración
, afirmó la titular de la Secretaría de Energía (Sener), Georgina Kessel. Al inaugurar el Congreso Mexicano del Petróleo 2010, la funcionaria dijo que para enfrentar los retos hay que hacer un balance de lo bueno y lo malo.Ante expertos del sector hidrocarburos y directivos de empresas especializadas, expuso que lo registrado en los últimos años, particularmente en la exploración y extracción de hidrocarburos, es el reflejo de las decisiones que se tomaron hace 10 y 15 años.
Los datos son contundentes, agregó, ya que "en el periodo 1990-2000 la inversión en exploración cayó 3.1% en promedio anual. Las cifras de inversión en exploración y producción nunca se acercaron a los 100,000 millones de pesos por año".
Kessel agregó que para revertir esta situación en la última década, si se comparan los recursos asignados a exploración y producción, la inversión creció a tasas de 12% en promedio anual y, específicamente, los recursos canalizados a exploración registraron un incremento de 16%.
Asimismo, destacó que la inversión en exploración en la actual administración ha crecido a tasas de 24% en promedio anual desde 2006.
La producción de crudo de México
, desde los 2.573 bpd en julio, de acuerdo con estadísticas de Pemex.La petrolera reportó a fines de julio
, principalmente debido a pérdidas cambiarias y los controles de precio internos a las ventas de combustible.Entre los logros alcanzados por las medidas impulsadas por el Gobierno, la secretaria de Energía dijo que se incrementó la tasa de restitución de reservas probadas, se estabilizó la producción de crudo y se ha mantenido la producción de gas natural.
De acuerdo con la funcionaria, gracias a las modificaciones legales aprobadas a finales de 2008, Pemex cuenta ahora con los instrumentos necesarios para alcanzar las metas planteadas para el sector al 2012.
Entre ellas destacan incrementar gradualmente la producción de crudo y alcanzar una tasa de restitución de reservas de 100%, detalló, así como aumentar al 98% la tasa de aprovechamiento del gas natural para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.