América Móvil estudia negocio en Serbia

La telefónica mexicana analiza una participación en la empresa estatal de telefonía de ese país; autoridades serbias dijeron que la compañía de Carlos Slim aún no ha hecho una oferta.
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La mexicana América Móvil, la tercera mayor telefónica celular del mundo por número de suscriptores, está interesada en una participación en la empresa estatal de telefonía de Serbia.

La ministra de telecomunicaciones de Serbia, Jasna Matic, dijo que América Móvil, propiedad del

, ha expresado interés en comprar la documentación de la licitación, pero no ha ofrecido un precio por una participación en la empresa estatal, Telekom Srbija.

El Gobierno de Serbia tiene un 80% de la compañía, mientras que el operador griego OTE posee el 20% restante.

Serbia está ofreciendo una participación del 51% de la compañía, en un proceso que se lanzó en octubre. Las empresas interesadas tienen hasta el 10 de diciembre para comprar las bases del proceso.

"Veremos si la empresa mexicana comprará la documentación la semana que viene", dijo Matic el martes a periodistas.

, cerró el tercer trimestre del 2010 con 267 millones de accesos, de los cuales 217 millones son suscriptores móviles, 28 millones de líneas fijas, 12.5 millones de accesos de banda ancha y 9.4 millones de televisión de paga.

Hace dos semanas, la compañía reveló un plan de expansión a cuatro años que incluye un agresivo crecimiento de suscriptores, un cable submarino para mejorar el tráfico en Latinoamérica, servicios financieros móviles y producción de contenidos de medios en algunos países donde ya ofrece TV de paga, como Colombia.

Su director general, Daniel Hajj, también mencionó la posibilidad de expandirse fuera del continente, ante los pocos mercados en los que no tiene presencia en América.

Sin embargo, analistas dijeron que entrar a Serbia no es la decisión más obvia para América Móvil.

"Esta historia mexicana es difícil de entender. No puedo identificar su interés en entrar a Europa a través de Serbia, que no está integrada a los sistemas europeos y es un callejón sin salida de telecomunicaciones", dijo Mahmud Busatlija, un consultor con sede en Belgrado.