El pleno de la Cámara de Diputados aprobó este jueves una reforma que sanciona hasta con 18 años de cárcel el robo de hidrocarburos en México y en donde se contemplan hasta 10 años de prisión a los propietarios de gasolineras que alteren las bombas para expender menos gasolina y diésel. En el marco de la sesión ordinaria en San Lázaro, se aprobó con 386 votos a favor y dos abstenciones las reformas al Código Penal Federal, el de Procedimientos Penales y la Ley contra la Delincuencia Organizada, para tipificar como delito grave el robo de hidrocarburos.
En tribuna y al fundamentar el dictamen, el diputado federal del PAN, Oscar Arce Paniagua expuso que la reforma considera a las personas acusadas de robo de hidrocarburos como miembros de la delincuencia organizada.
A nombre del PRI, el diputado federal Arturo Zamora Jiménez expuso que el robo de hidrocarburos daña a la economía nacional, lesiona y pone en peligro a la población, genera competencia desleal, provoca corrupción institucional y social.
Ante ello, manifestó que es importante establecer una pena de 3 a 10 años de cárcel a quien sustraiga o aproveche hidrocarburos de las instalaciones petroleras o altere instrumentos de medición para enajenar los combustibles.
Asimismo propuso castigo de 3 a 6 años de cárcel y de 500 a 1,000 días de multa a los expendedores de gasolinas o diésel que con conocimiento entreguen una cantidad menor en 1.5% a la pactada o 4% en caso de gas.
El legislador por Jalisco expuso que se penalizará con 8 a 12 años de prisión y de 1,000 a 12,000 días de multa a quien sustraiga hidrocarburos de ductos o instalaciones de Pemex.
"Se aumenta la pena hasta en una mitad cuando se trate de un trabajador o servidor público de la industria petrolera", apuntó.
Zamora Jiménez dijo que se incluye este delito en lo que contempla la Ley contra la Delincuencia Organizada a
Pedro Vázquez González, coordinador del Partido del Trabajo, respaldó las reformas que son un paso importante en el combate a este tipo de delitos.
En las que también se establecen de seis a dos años de prisión y 500,000 días de multa a quienes resguarden de manera ilícita petróleo crudo o hidrocarburos refinados, procesados o derivados en una cantidad menor a 300 litros, indicó.
Se plantean sanciones que cuando la cantidad sea mayor a los 300 litros y menor a 1,000, se impondrán de dos a cuatro años de cárcel; igual o mayor a 1,000 litros, habrá de cuatro a 10 años de prisión y de 1,000 a 12,000 días de multa.
Asimismo se prevén castigos de tres a 10 años de prisión a quien altere los instrumentos de medición utilizados para enajenar o suministrar los hidrocarburos o sus derivados.
La reforma aprobada y devuelta al Senado faculta al Ministerio Público para que se encargue de vigilar el aseguramiento del hidrocarburo sustraído y su posterior entrega a la paraestatal o sus subsidiarias.