Acapulco y Florida en la mira de Slim

Con el DF, son ciudades clave en el crecimiento de la cadena hotelera Ostar, propiedad del magnate; la empresa, pequeña en el sector, podría apoyarse en el negocio de bienes raíces para su expansión.
slim soumaya

Florida, Ciudad de México

serán claves para el crecimiento este año de la cadena hotelera Ostar, propiedad del quien sigue expandiendo su imperio más allá de Roberto Slim Seade, sobrino del magnate mexicano
, se ha encargado del negocio hotelero los últimos seis años, adquiriendo a lo largo del país propiedades antiguas para luego remozarlas.

Ostar -que opera como parte de Inmuebles Carso, unidad que en enero

tras su escisión del conglomerado -, cuenta con 1,500 plazas hoteleras, y sus propiedades rondan los 100 millones de dólares.

Aunque la compañía aún es un jugador pequeño comparado con otras cadenas hoteleras mexicanas e internacionales que operan en México, pues sólo tiene seis hoteles y administra uno más, Slim Seade dijo que la empresa podría apoyarse en el negocio de bienes raíces para su expansión.

La joya de Ostar es el centenario Geneve, en donde el presidente Porfirio Díaz cenó con su familia el 20 de noviembre de 1910, cuando se inició la Revolución Mexicana.

Junto al hotel Calinda Beach, en Acapulco, contribuyen con cerca del 80% de los ingresos de Ostar, que además tiene propiedades en los estados de Veracruz, Aguascalientes, Morelos y Tabasco.

La firma también planea operar un hotel de lujo junto al

que construyó Slim para hospedar su colección de arte en la Ciudad de México.

Se espera que ese hotel sea inaugurado en dos años, como parte de un complejo que también incluye tiendas, teatros, restaurantes, parques, oficinas y condominios, dijo Slim Seade.

La apuesta por Acapulco y Florida

ha ahuyentado a algunos turistas, sin embargo los inversionistas siguen inyectando dinero a la industria turística local.

"En Acapulco sí ha afectado algo

(...), tenemos que reenfocarnos en el mercado nacional", dijo el ejecutivo.

Ostar -nombre que tenía la tienda del padre de Slim, un inmigrante libanés, a inicios del siglo XX- compró el año pasado un hotel Ramada en Kissemmee, a un par de kilómetros del Walt Disney World de Orlando.

"Queremos hacer de este hotel un destino para el turismo internacional. Los brasileños e ingleses van mucho", dijo a Reuters el director general de Ostar, Roberto Slim Seade, en sus oficinas en Ciudad de México.

Orlando, un popular destino para familias con hijos pequeños por todas las opciones de entretenimiento ubicadas en la zona, cuenta con unas 100,000 plazas hoteleras, dijo Slim Seade.

La Ciudad de México, una urbe de 20 millones de habitantes, cuenta con 28,000 habitaciones.

de la revista Forbes por segundo año consecutivo, tiene un emporio que abarca desde cafeterías hasta compañías mineras y de telecomunicaciones.

En 1990, Slim compró al Estado la compañía de telefonía fija Teléfonos de México, y hoy en día tiene participaciones en la operadora de tiendas departamentales Saks Inc,

en la firma de servicios petroleros y en la administradora de fondos entre otras.