El operador de planta nuclear, en crisis
Tokyo Electric Power (TEPCO) aseguró 24,000 millones de dólares en créditos bancarios, pero dijo que no será suficiente para seguir funcionando y pagar por el peor desastre nuclear de Japón, aumentando las expectativas de que el Gobierno intervendrá para rescatar a la compañía.
En una señal más de la desorganización en la mayor empresa de energía de Asia, Tokyo Electric dijo que su presidente había sido hospitalizado y que le pasaría el mando al presidente del directorio, Tsunehisa Katsumata.
El presidente ejecutivo, Masataka Shimizu, al igual que su compañía, ha estado bajo una enorme presión desde que el terremoto y el tsunami del 11 de marzo golpearon al complejo nuclear Fukushima Daiichi, causando fugas de radiación, apagones y evacuaciones.
Katsumata dijo en una rueda de prensa que Tokyo Electric, no había tenido tiempo para valorar el impacto financiero del desastre en su planta nuclear de Fukushima, pero que esperaba que fuera "muy severo".
Los dos billones de yenes (24,000 millones de dólares) en créditos asegurados por prestamistas, encabezados por Sumitomo Mitsui Financial Group, no fueron suficientes, dado el combustible y otros costos y que la compañía discutirá con el Gobierno el modo de asegurar que tiene un financiamiento adecuado, dijo.
"Hay muchas discusiones acerca de la nacionalización, pero haré mi mayor esfuerzo para asegurar que TEPCO siga siendo una compañía privada", dijo Katsumata.
Los analistas ven escasas posibilidades de que la compañía, que entrega electricidad a un tercio de la población japonesa, pueda sobrevivir en su forma actual.
Las acciones de TEPCO, que cerraron el martes en su cota más baja en seis décadas, cayeron otro 17.7% este miércoles a 466 yenes, pero luego dejaron de cotizar tras los reportes de la hospitalización de Shimizu.
Más de 100 personas protestaron este miércoles fuera de las oficinas centrales de TEPCO en Tokio. Testigos Reuters dijeron que los manifestantes pedían el "fin a la energía nuclear".