Airbus se benefició este martes de la preocupación de las aerolíneas por el encarecimiento de los combustibles y atrajo clientes para sus aviones de mejor eficiencia durante la Muestra Aeronáutica de París. La compañía europea compite con Boeing por la posición del mayor fabricante de aeronaves del mundo.
Airbus intentaba centrar su atención en los pedidos después de incidentes que implicaron un ala y una caja de transmisión defectuosa y la tardanza para tener listo su nuevo jet antes de esta muestra, la más importante del sector aeronáutico.
La atracción principal de la muestra aeronáutica de este año es un avión que no surcará el aire al menos hasta 2015: el Airbus A320neo, una versión modernizada de la familia de batalla del A320.
El avión tiene sólo un pasillo y está destinado a los viajes de corto y mediano recorrido, pero con motores más eficientes en consumo de combustible.
Debido a las alzas mayores del petróleo durante el año, la aeronave se ha convertido en el modelo de más ventas de la empresa.
La aerolínea estadounidense JetBlue Airways anunció este martes que se comprometió a comprar 40 aviones A320neo y que cambió su pedido de 30 A320 por el modelo de mayor tamaño A321, que tiene las puntas de las alas modificadas para mejorar el rendimiento del consumo.
Airbus también recibió un compromiso de 50 A320neos de la compañía arrendadora de aeronaves de Estados Unidos, CIT Group.
Los A321neo tienen un precio de lista de unos 106 millones de dólares, ante lo cual la operación con CIT Group alcanzaría los 5,300 millones de dólares, aunque las aerolíneas negocian descuentos considerables.
La aerolínea taiwanesa TransAsia Airways ordenó seis A321neo, mientras que la indonesia Garuda se comprometió a adquirir 25 A320. El compromiso de ésta, que no es todavía un pedido firme, incluye 15 A320 ordinarios y 10 A320neo.
Airbus comenzó en diciembre a comercializar los A320 y tiene planes de comenzar las entregas a finales de 2015. Para este martes acumulaba 594 pedidos y compromisos de compra del aparato.
Boeing luce su 737
Boeing minimizó los numerosos pedidos del neo, el cual compite con su 737 de un sólo pasillo. "No vimos nada que no esperáramos", dijo Jim Albaugh, director general de aviones comerciales de la firma.
Por su parte, la aerolínea nórdica de bajo costo Norwegian Air Shuttle anunció un pedido de 15 aviones Boeing 737-800 en un acuerdo valuado en 1,200 millones de dólares, aunque las líneas aéreas suelen negociar descuentos en pedidos grandes.
Airbus inició el día con la confirmación de un acuerdo con Rolls Royce para proveer motores de mayor potencia para una versión mejorada del A350-1000.
El lunes, Airbus y Boeing anunciaron pedidos, opciones y compromisos que ascienden a un total de 25,000 millones de dólares en el día de inauguración de la exhibición, pero el primero también sufrió el corte en un ala de su superjumbo A380 y anunció retrasos para su modelo A350-1000.
En el convenio más reciente de este martes, la aerolínea rusa Aeroflot anunció el encargo de ocho aeronaves 777 de Boeing, en un acuerdo que asciende a 2,270 millones de dólares.
Aeroflot comprará la versión 300-ER del avión 777 de largo alcance.
La muestra aérea se realiza en el aeropuerto Le Bourget, a las afueras de París.