La decisión de
de cancelar la emisión de un bono por la volatilidad en los mercados fue aplaudida por los analistas, que lo vieron como una medida prudente, pero coincidieron en que tampoco puede esperar demasiado para refinanciar pasivos.La empresa dijo el jueves pasado que no realizaría la emisión de un bono a ocho años por 650 millones de dólares, debido a la actual inestabilidad en los mercados, en una decisión que fue elogiada por analistas que prefieren que la empresa espere un mejor momento.
"Consideramos la decisión de suspender como correcta y esperamos que Cemex regresará con un bono de tamaño similar para emitir en algún momento en los próximos meses en mejores condiciones de mercado", dijo Banamex en un reporte.
El instrumento financiero ofrecía un rendimiento del 9.5% que no fue suficiente para compensar la percepción de riesgo, en un día en que
para la mayor economía del mundo.Según IFR, un servicio de información financiera de Thomson Reuters, los inversores estaban pidiendo un rendimiento de 9.75%, y aunque las órdenes habrían alcanzado los 800 millones de dólares, Cemex no estaba dispuesta a pagar más.
"El hecho de que puedan posponer la colocación me deja un poco más tranquilo, ya que implica que no era una urgencia extraordinaria", dijo Carlos Hermosillo, analista de Banorte-IXE.
Tras el anuncio, las acciones de Cemex subieron el jueves pasado, pero este viernes caían 0.31% en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) a 9.57 pesos, mientras en Nueva York perdían 0.49% a 8.04 dólares, en línea con los mercados internacionales.
Los recursos del bono, que habría sido la tercera emisión en su tipo de la empresa en lo que va del año, habrían servido para refinanciar sus próximos vencimientos y hacer frente a una opción de compra de los activos de su socia estadounidense Ready Mix que vence en septiembre próximo, según analistas.
Con una débil demanda de cemento en la mayoría de sus mercados y una limitada generación de efectivo, la compañía enfrenta un vencimiento de 66 millones de dólares este año y
, si no encuentra un nuevo socio para este negocio.El analista de Santander, Gonzalo Fernández, tiene para Cemex una expectativa de un flujo libre de efectivo de 451 millones de dólares para el 2011, que apenas le permitiría enfrentar sus necesidades de liquidez.
"A ninguna empresa le gusta estar tan justa", dijo Fernández a Reuters vía telefónica. "Tiene que refinanciar de alguna manera, aunque por ahora realmente no hay una urgencia".
Además, la cementera tenía al cierre de marzo pasado un efectivo en caja por 656 millones de dólares, del que podría echar mano.
"Sin embargo, si la volatilidad continúa, podría
bancarios y la posibilidad de que los costos de la deuda sigan aumentando", agregó Fernández, en un reporte.La compañía tiene que amortizar además 390 millones de dólares el próximo año y 762 millones de dólares en el 2013, antes de tener que enfrenar un gran vencimiento por 8,300 millones de dólares en el 2014.