De concretarse la compra de 50% de Iusacell por parte de Televisa, la operadora de telefonía celular tendría el potencial de que sus ingresos crezcan a tasa de doble dígito en los próximos años, según estimaciones de BBVA Research.
De acuerdo con esas previsiones, las ganancias de la telefónica crecerían 15.4% en 2012 y 20.2% en 2013, además
Sin embargo, si no se completa el acuerdo con Televisa, Iusacell puede enfrentar un panorama muy complicado, comenta Alejandro Gallostra, analista en telecomunicaciones de BBVA Bancomer.
"Iusacell es el competidor más débil en términos financiero del sector en México. No desaparecería mañana, pero a largo plazo sí podría desaparecer", explica.
Sin embargo, Gallostra considera que, si no es Televisa, otra compañía podría rescatar a la telefónica antes de llegar a ese extremo.
La fuerte posición de Telcel en el sector, además de las estrategias comerciales agresivas de Telefónica, dan un escaso margen de maniobra a Iusacell para sobrevivir si el acuerdo con Televisa no se culmina, dijo a su vez Valeria Romo, analista de Monex.
"Si no se concreta la adquisición, Iusacell seguirá perdiendo posición de mercado. Telcel tiene 64%, Telefónica 17%, y el otro 17% restante lo tienen todas las demás; Nextel va fuerte con su estrategia publicitaria, además de que Telefónica sigue castigando márgenes", expresa.
BBVA Research estima que, a pesar del potencial de crecimiento de Iusacell, Televisa pagará cara
Asimismo, consideró a causa del crecimiento natural del mercado de telefonía celular, Iusacell no le quitará mucho mercado a América Móvil, aunque Telefónica sería su competidor más cercano.
La Comisión Federal de Competencia (CFC) debe validar la inversión de Televisa en Iusacell el 24 de enero, y tanto Gallostra como Romo consideran que el regulador dará luz verde al acuerdo,
"La CFC teme que se dé una fusión del 50-50, por lo que pediría que una de las compañías tenga el control", anticipa Gallostra.
Una decisión adversa por parte del ente antimonopolios generará una serie de reclamos legales, prevé Vidal Romero, profesor investigador del departamento de Ciencias Políticas del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM).
"El problema no es con los reguladores, sino con el Poder Judicial, donde los asuntos pueden tardar años", comenta el especialista.