Los costos de manipular las tasas Libor
Ya han rodado cabezas en el banco británico Barclays. Pero la entidad no era la única que manipulaba las tasas de interés mundiales.
El presidente de Barclays, Marcus Agius, renunció el lunes pasado y el director ejecutivo Bob Diamond siguió sus pasos este martes. Más tarde, el director operativo del banco, Jerry del Missier, renunció con efecto inmediato. Tal vez son los primeros de muchos ejecutivos que caerán por una investigación más amplia sobre la manipulación de las tasas de interés por parte de grandes bancos.
Otros siete bancos se citan sin ser nombrados en los documentos hechos públicos como parte del acuerdo al que llegó Barclays la semana pasada con la Autoridad de Servicios Financieros (FSA por sus siglas en inglés), el regulador bancario británico.
Barclays fue multado con alrededor de 453 millones de dólares por la FSA , la Comisión de Comercio de Futuros de Productos Básicos y el Departamento de Justicia de Estados Unidos.
La acometida de los accionistas de Barclays y de los reguladores en Estados Unidos y Reino Unido ha sido veloz pero la investigación en torno al manejo de las tasas de interés mundiales lleva cuatro años y aún no ha terminado.
"Esto eclipsa en términos de magnitud cualquier estafa financiera en la historia de los mercados," advierte Andrew Lo, profesor de finanzas en el Instituto de Tecnología de Massachusetts.
Deutsche Bank, Royal Bank of Scotland, Credit Suisse, Citigroup, JPMorgan Chase y UBS se encuentran entre los bancos que han reconocido que están siendo investigados por las autoridades reguladoras.
Se presume que Bank of America también es investigado , pero la institución no ha hecho declaraciones públicas sobre el escándalo, y un portavoz declinó comentar el tema.
"No hay nada en los documentos que muestre que esto es exclusivo de Barclays", señala Arun Subramanian, socio del bufete jurídico Susman Godfrey, el abogado principal de un grupo de demandantes que han emprendido acciones legales contra Barclays y otros bancos por los daños producidos por los cambios en las tasas de interés.
La FSA indicó que le otorgó a Barclays un descuento del 30% sobre las multas por haber alcanzado prontamente un acuerdo.
"La pregunta es si el anuncio de Barclays se dio primero porque ellos eran los cabecillas de la actividad o porque fueron los más cooperativos," plantea Owen Watkins, ex regulador de la FSA y socio de la firma londinense de abogados Lewis Silkin.
Las tasas de interés variables se fijan a través de un peculiar proceso que depende en gran medida de las recomendaciones hechas por los operadores o traders de hasta 18 bancos representativos.
La tasa variable de referencia es la London Interbank Offered Rate, o Libor, y sirve como referencia mundial para hipotecas, créditos estudiantiles y lo que pagan las ciudades y los estados por pedir dinero prestado. Afecta a instrumentos financieros con valor de hasta 800 billones de dólares.
Barclays y otros bancos alteraban esos costos cuando los reportaban a los reguladores, según consta en los documentos de la FSA. Trabajaron en conjunto con otros bancos para mover dichas tasas en direcciones que ayudaron a que los bancos se beneficiaran de las posiciones de negociación.
De acuerdo a correos electrónicos y mensajes de texto condenatorios presentados como parte del acuerdo de Barclays con la FSA, un email de un empleado de Barclays enviado en octubre de 2006 le pedía a "un trader externo" fijar más baja la tasa Libor a tres meses.
Cuando la tasa descendió al día siguiente, un trader de otro banco le escribió al operador de Barclays: "Amigo, ¡te debo una grande! Ven cualquier día después del trabajo y abriré una botella de Bollinger."
Mientras que las investigaciones regulatorias siguen su curso, varios demandantes aguardan a que un juez del Distrito Sur de Nueva York se pronuncie sobre si puede progresar un caso de daños potenciales derivados de la manipulación de la tasa LIBOR. La ciudad de Baltimore es el principal demandante en este caso.
Entre tanto, el ex director de la entidad bancaria, Bod Diamond, no celebrará como el resto de los estadounidenses el día de la Independencia, pues el miércoles está citado para comparecer ante los legisladores británicos por el escándalo.