Consorcio descarta parar obra en Panamá
El consorcio encargado de la ampliación del Canal de Panamá descartó este domingo que el lunes paralice las obras, aunque se adjudicó el derecho de suspender los trabajos "en cualquier momento". "El preaviso enviado el día 30 (de diciembre) da derecho al consorcio a suspender las obras en cualquier momento a partir del día 21 sin que en este momento ese escenario esté contemplado", advirtió el Grupo Unidos por el Canal de Panamá (GUPC).
El grupo formado por la empresa española Sacyr Vallehermoso, la italiana Impregilo, la belga Jan De Nul y la panameña CUSA indicó que el consorcio "podrá evaluar la situación y tomar la decisión que corresponda en cualquier momento".
El GUPC envió el 30 de diciembre a la Autoridad del Canal (ACP) una nota de aviso de suspensión de obras en 21 días para reclamar 1,600 millones de dólares por supuestos sobrecostos.
En medio de intensas negociaciones, el ultimátum fue reiterado el jueves por el consorcio.
Artículo relacionado: Sacyr y Panamá acercan posturas
El administrador de la ACP, Jorge Quijano, dijo que la comunicación se mantenía en aras de impedir la paralización de la construcción del tercer juego de esclusas, el principal componente de la expansión iniciada en 2007.
Una fuente de la ACP confirmó a la agencia Notimex que las posiciones de ambas partes se mantenían este domingo.
"La ampliación se va a completar con ellos o sin ellos", advirtió Quijano, quien además reveló que se preparan para asumir el control de las obras si al final el GUPC decide abandonar los trabajos por falta de liquidez.
Para solventar el problema de "flujo de caja" del consorcio, la ACP propuso adelantar el pago de 100 millones de dólares, pero las empresas pidieron 400 millones de dólares, lo cual fue rechazado por la entidad canalera.
Además en una aparente división en el grupo, Impregilo propuso dos alternativas, un pago total de 1,000 millones de dólares por sobrecostos, o el adelanto de 500 millones de dólares para continuar con los trabajos, propuesta también desechada por la ACP.
Artículo relacionado: Panamá, de cara a paralización en obra
"El lunes es un momento importante porque ahí comienzan a definirse las cosas de una manera y otra", planteó Quijano.
El GUPC empezó a reducir el ritmo de trabajo desde diciembre a menos de 30% de su capacidad, con el despido de más de 2,600 obreros en cinco meses, de un plantilla de más de 5,000.
El grupo internacional aduce que los sobrecostos están relacionados con fallas geológicas no registradas antes de la licitación del contrato de 2009 por 3,221 millones de dólares, lo cual les generó trabajo no contemplado para producir los agregados.
La ACP reiteró que cualquier reclamo debe enmarcarse en el contrato, con las tres instancias establecidas, dos de ellas sin el control canalero.
Ante cualquier eventualidad, la ACP tiene programada el martes una reunión con la aseguradora Zurich International, tenedora de una fianza de cumplimiento por 600 millones de dólares para determinar las acciones a seguir en caso de la suspensión de las obras.
Quijano calculó que en caso de la paralización, la ACP asumiría el control total en unos 15 días.
La expansión para añadir un carril adicional a los dos existentes inició en 2007 con una inversión de 5,250 millones de dólares, para finalizar el 21 de octubre de 2014, pero ahora sufre un retraso de unos nueve meses.
Entra la Comisión Europea
El brazo ejecutor de la Unión Europea aceptó mediar en el conflicto entre las autoridades de Panamá y el consorcio.
El vicepresidente del organismo europeo y responsable de Industria, Antonio Tajani, recibió una petición del grupo para que intente mediar en la solución del problema.
Tajani dijo que lo más urgente era conseguir tiempo dado que el lunes termina el ultimátum que las empresas dieron.
Con información de Notimex y EFE
