Pemex olvida invertir en aguas profundas

La petrolera es una de las que menos invierte en proyectos de crudo de alto riesgo en el mundo; la mayor parte de los 2.5 billones de pesos que tiene para este sexenio irá a campos en declive.
plataforma, crudo, petroleo, pemex (Foto: Thinkstock)

Petróleos Mexicanos (Pemex) cuenta con una de las inversiones más bajas en proyectos de elevados costos y riesgos de extracción en el mundo, en una carrera donde las mayores petroleras dedican cada vez más dinero a zonas de aguas profundas y ultraprofundas para mantener sus volúmenes de producción, según un estudio internacional sobre las perspectivas del sector hacia 2025 y 2050.

“Las firmas completamente privadas tiene el 52% del potencial de producción hacia 2050, que se suma a otro 13% que tienen las empresas estatales con participación privada. Esto deja el 35% en las manos de las empresas totalmente del Estado”, detallaron los expertos de la iniciativa Carbon Tracker en su estudio 'Los costos de la demanda de carbón: evaluando los riesgos financieros de los gastos en inversiones de crudo'.

El documento difundido este jueves destaca la apuesta de las empresas privadas energéticas por invertir fuertes cantidades en proyectos de aguas profundas y ultraprofundas, que llegan a presentar costos de producción que sobrepasan los 80 dólares por barril.

Pemex puede invertir cerca de 13,883 millones de dólares (mdd) entre 2014 y 2025 en proyectos de aguas profundas, por debajo de la apuesta de Petrobras, que invertirá casi 79,336 mdd en el periodo referido. ExxonMobil lo haría con 22,307 mdd o Shell con 20,254 mdd, según datos del documento, que ubica a la petrolera mexicana en el octavo sitio de 21 firmas del sector en este rubro.

Pemex no figura en proyectos de aguas ultraprofundas o recursos convencionales con costos superiores a los 80 dólares por barril .

La petrolera brasileña Petobras, de control estatal pero con inversión privada, lidera las perspectivas de gasto en proyectos en aguas profundas, mientras que las gigantes multinacionales como ExxonMobil, Shell, Chevron, BP o Total cuentan con fuertes inversiones en diversos proyectos de alto riesgo como en el Ártico, shale oil, además de aguas profundas y ultraprofundas.

México tiene 43,000 millones de barriles de reservas probables, y la mayoría se encuentra en zonas donde Pemex ya produce crudo; pero se estima que en regiones de aguas profundas y ultraprofundas y de shale gas existe un mayor potencial de hidrocarburos.

Pemex dejó a la iniciativa privada cerca de 78,000 millones de barriles de crudo equivalente para explorar, en caso de que se apruebe la reforma energética, que representan el 69% de los 112,000 millones de barriles en reservas prospectivas. Éstas podrán ser explotadas a través de licitaciones que la Secretaría de Energía (Sener) espera adjudicar a partir del primer semestre de 2015.

Pemex, atado al petróleo fácil

En cambio, las inversiones de la paraestatal se mantienen en proyectos de bajo riesgo como Cantarell o Ku-Maloop-Zaap, donde los costos de producción pueden alcanzar apenas los 20 dólares por barril, pero que a su vez han registrado fuertes caídas en su producción.

El Gobierno del presidente Enrique Peña Nieto va a destinar 2.4 billones de pesos en inversión en exploración y producción de crudo durante su sexenio, de los cuáles cerca de 500,000 millones de pesos (mdp) se dirigirán a Cantarell y Ku-Maloop-Zaap,

La producción en Cantarell se ha desplomado de su pico histórico en 2004, de 2.12 millones de barriles promedio al día a cerca de 355,000 en los primeros meses de 2014, una caída de 84%.

El proyecto de Ku-Maloop-Zaap ayudó a compensar esta caída, al pasar de 304,000 a 864,000 barriles en el mismo periodo, aunque con respecto a 2013 ya no registra crecimiento.

En la misma tendencia, la producción total del país ha caído en casi 25% en la última década, al pasar de 3.4 millones de barriles a 2.5 millones, a pesar de que los montos de inversión destinados a la exploración han aumentado en casi 60%.

El Gobierno ha subrayado que la “era del petróleo fácil terminó”, por lo que uno de los objetivos de la reforma constitucional aprobada a finales del año pasado es abrir la inversión privada en zonas como aguas profundas y shale gas, donde Pemex ha sido incapaz de explotar.

Pero Pemex pretende invertir apenas poco más de 64,000 mdp en el Área de Perdido, en la parte mexicana del Golfo de México en aguas profundas, en los próximos seis años, apenas el equivalente a unos 5,000 mdd.

“Mientras que el promedio de los países productores de crudo obtienen el 57% de su petróleo de campos maduros (aquellos con un avance de extracción de reservas mayor al 50%), México actualmente depende en 70%”, explicaron expertos que participaron en el análisis 'Las promesas de la reforma energética de México', divulgado a principios de abril de este año.

Los analistas del estudio consideran que la paraestatal requeriría de 830,000 mdd para extraer todas las reservas de yacimientos en aguas profundas, en pozos de shale gas, además de sus reservas posibles, muy lejos de sus posibilidades financieras.