La arrendadora mexicana Unifin espera tasas de crecimiento de entre 20% y 30% anual apoyada en los recursos que obtuvo de un exitoso debut en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), al tiempo que descartó estar interesada en convertirse en un banco.
"No nos interesa ser banco, no estamos interesados en el sector bancario, hoy por hoy, por una sencilla razón: está el sector en el que atacamos tan poco penetrado que tenemos muchos años de trabajo, no queremos desviar la atención", afirmó Rodrigo Lebois, presidente de la arrendadora, en una reunión con periodistas.
Unifin, cuyas acciones han subido casi 11% desde que concretó su oferta inicial el 22 de mayo, es una entidad financiera no bancaria enfocada principalmente en el arrendamiento a tasa fija y deducible de impuestos, conocido como arrendamiento puro, para pequeñas y medianas empresas.
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La oferta "se da principalmente por necesidades de un crecimiento importante, para estar preparados para ese crecimiento (...) en estos momentos estamos con objetivos entre 20% y 30%", dijo Lebois.
Lebois sostuvo que estos estimados son conservadores frente a su desempeño histórico de entre 40% y 50% anual.
La firma dedica unos 1,000 millones de pesos mensuales a la adquisición de activos para arrendamiento, precisó el directivo.
Su salida a Bolsa alcanzó una demanda de más de siete veces y generó especial interés entre inversores institucionales, según datos de uno de los agentes colocadores.
Lebois sostuvo que el éxito de su incursión responde
, que tienen pocas alternativas para adquirir activos fijos y temen a los riesgos propios del crédito bancario.Destacó además que la presencia del negocio de arrendamiento puro en México es baja respecto a otros países de la región como Chile o Colombia.