Las autoridades estadounidenses ordenaron este lunes llamar a reparación a los costosos y exclusivos autos McLaren P1 porque su cofre puede abrirse durante la marcha.
"Si el capó se abre cuando se conduce, el riesgo de accidente aumentan", dijo en un comunicado la NHTSA, la agencia estadounidense de seguridad vial.
Los McLaren P1 cuestan más de un millón de dólares y pueden alcanzar una velocidad de 400 kilómetros por hora.
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Apenas 375 autos P1 fueron producidos entre 2013 y 2015. El auto es híbrido (gasolina/electricidad) y su tecnología está inspirada en la de la Fórmula 1.
El fundador de McLaren, el neozelandés Bruce McLaren, murió en 1970 cuando probaba un prototipo al cual se le desprendió el cofre cuando marchaba a toda velocidad.