Gobierno obligará a ir a zonas rurales con la Red Compartida
Las bases de la licitación para adjudicar la instalación y operación de la red pública compartida de telecomunicaciones obligarán a que los ganadores desplieguen infraestructura en las poblaciones con menos de 10,000 habitantes. El objetivo es asegurar que las empresas no sólo se centren en ofrecer sus servicios en las zonas con mayor densidad de población.
“Las bases obligan al desarrollador a que por cada punto porcentual de cobertura urbana... deben tener 0.15 puntos en localidades menores a 10,000 habitantes”, explicó la subsecretaria de Comunicaciones de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), Mónica Aspe, este jueves en la presentación de las bases de licitación del proyecto.
Los interesados en concursar por desplegar y operar la red compartida de servicios móviles de banda ancha deberán alcanzar el 30% de cobertura en marzo de 2018, y tendrán hasta 7 años para completar el proyecto de llevar internet de banda ancha a al menos el 85% de la población.
Esto quiere decir que por cada punto que avancen en su primera meta, deberán construir antenas e infraestructura en zonas rurales o de baja densidad de población para respetar esta regla.
La llamada red compartida, que pudiera atraer inversiones cercanas a los 7,000 millones de dólares, servirá para construir infraestructura que permita arrendar capacidad de red para que operadores privados ofrezcan a su vez servicios de Internet de banda ancha, como los de tecnología 4G/LTE que ya ofrecen las mayores firmas del país en algunas zonas.
“El concursante ganador aportará todo el financiamiento para construir y operar la red mayorista... el concurso terminará con la asignación de una APP por 20 años”, dijo el titular de la SCT, Gerardo Ruiz Esparza.
La licitación, que se adjudicará el 24 de agosto, valorará el despliegue que ofrezcan los consorcios que busquen adjudicarse el proyecto, por lo que el mínimo iniciará en 85%.
El Gobierno percibe un gran interés para participar en el despliegue de esta red, con cerca de 100 firmas, entre extranjeras y nacionales, que han mostrado su disposición en participar, aseguró la vicepresidente para América Latina de Bank of America Merrill Lynch, Sonia Dulá, cuya compañía sirvió como asesora para acercar el proyecto a los fondos de inversión en el mundo.
El Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) también dará a conocer los criterios que los consorcios deben cumplir para que presenten su solicitud para participar en el concurso, y la cual deberá tener el aval de este regulador, recordó el titular del órgano, Gabriel Contreras.
Las autoridades confían en que el modelo del proyecto resulte atractivo económicamente para los participantes, pues a pesar de que existen ya redes de internet de alta velocidad, los operadores siempre requieren de más espectro para otorgar mejores servicios a sus clientes.
Además, las compañías actuales no brindan servicios en zonas alejadas o con poca población, pero un proyecto como el de la red compartida puede generar economías de escala al ser la única que dé estos servicios en poblaciones pequeñas.
Telcel, Movistar y AT&T –a través de Nextel- ya ofrecen servicios de 4G/LTE en algunas ciudades y poblaciones, aunque poco más del 20% de los usuarios de telefonía con acceso a internet acceden a través de esta tecnología.
