Batalla inmobiliaria por cielos tapatíos
El Tribunal de lo Administrativo del Estado de Jalisco decretó la nulidad de todas las autorizaciones que permitieron construir Torre Q, un inmueble de 13 niveles ubicado en la colonia Providencia, en una zona de Guadalajara que permite la edificación de hasta ocho plantas, por lo que también ordenó el retiro de los pisos excedentes.
Sin embargo, el proceso de demolición de los cinco últimos niveles del inmueble, desarrollado por Grupo VEQ, está detenido por un amparo que presentó la habitante del departamento 606, quien resultaría afectada.
Pero ésta es sólo una de las cerca de 20 construcciones verticales de Guadalajara y Zapopan que enfrentan juicios similares por contravenir los planes parciales de desarrollo e incumplir con el Código Urbano de Jalisco. Otros desarrollos son las torres Alfa & Beta (de Hábitat Verticales), Torre Moba (de Diarco), Torre Due (de Balken) y Horizontes Chapultepec (de Grupo Lar).
Los dictámenes y licencias fueron aprobados por administraciones municipales anteriores, pero el cabildo actual, la Procuraduría de Desarrollo Urbano y los vecinos denuncian que contravienen el uso de suelo de la zona.
Gustavo Arballo, presidente de la CMIC Jalisco, asegura que todas las construcciones desde su inicio cuentan con dictámenes y licencias aprobados por el municipio, por lo que si hay irregularidades también son responsables quienes las autorizaron. “No es posible que una construcción ya habitada enfrente estos problemas, ni que estas acciones tengan que concluir con una orden de demolición”, critica.
Mientras tanto, los inversionistas de las torres Alfa & Beta tratan de evitar con un amparo la demolición de siete de sus 18 pisos; los de Horizontes Chapultepec hacen lo posible por conservar sus 17 niveles (11 permitidos); y los de Torre Due (seis niveles) están a la espera de que el Tribunal de lo Administrativo les resuelva definitivamente un juicio de amparo.