Azoteas verdes, aumento en la plusvalía
En los techos de viviendas y edificios el término ‘naturación’ comienza a echar raíces. Crear jardines en construcciones urbanas con el fin de mejorar la calidad del aire y regular la temperatura de las grandes ciudades está abriendo un nuevo mercado.
En otras regiones del mundo la comercialización de azoteas verdes ya es un negocio consolidado; en América del Norte crece 25% al año, en tanto que a nivel mundial Alemania es el país con el mayor número de superficies naturadas: una de cada diez azoteas cuenta con un sistema de naturación, de acuerdo con la Asociación de la Industria de las Azoteas Verdes de América del Norte.
Esto se debe a que los países signantes del Protocolo de Kyoto están generando una fuerte presión para que se lleven a cabo acciones que contribuyan a limpiar el aire y a eficientar el manejo de aguas pluviales y el consumo de energía. Pero además de los beneficios ambientales que generan, las azoteas verdes aumentan 15% el valor de un inmueble comercial, asegura Guadalupe Orozco Velazco, líder del proyecto ambiental del banco HSBC.
También reducen los gastos de operación. Por ejemplo, el consumo de aire acondicionado se puede reducir hasta 40% al año y la impermeabilización se realiza cada 35 años, indica la Asociación Mexicana para la Naturación de Azoteas (Amena). A pesar de ello, Green Roof Systems de México es la única empresa en el país que las explota comercialmente.
A la fecha sólo existen de 10,000 a 11,000 m2 de azoteas verdes en todo el país, de acuerdo con Gilberto Navas Gómez, profesor investigador de la Universidad de Chapingo. En el DF se localiza 90% de los techos verdes seguido de Guadalajara y Monterrey.
Gran potencial
Esta industria apenas está arrancando. A partir de 2008 crecerá 5% anualmente. El proyecto de Azoteas Verdes —naturación— llegó a México en 1999; comenzó en el Instituto de Biología de la UNAM, mediante un convenio con la Comisión de Recursos Naturales del Gobierno de la Ciudad de México (Corena) como una medida urgente durante la gestión de Cuauhtémoc Cárdenas —entonces al frente del gobierno capitalino—, para mitigar los altos índices de contaminación atmosférica en la Ciudad de México.
La obra fue financiada por Corena por medio del área de proyectos especiales del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), y construida en el edificio del Área de Colecciones del Jardín Botánico del Instituto de Biología de la UNAM con colaboración de la Universidad Autónoma Chapingo. Sin embargo, no se consolidó por la falta de una cultura verde y el alto costo de la instalación. Hasta el momento sólo personas o empresas con recursos se interesan en las azoteas verdes porque la inversión inicial resulta costosa, advierte María del Carmen Meza Aguilar, coordinadora de la especialidad de Arquitectura de Paisaje de dicha la Facultad de la UNAM.
“Colocar macetas en la azotea no es cultura verde”, advierte Meza Aguilar.
Además, alerta Alicia Ríos Martínez, coordindora del Herbario de la Facultad de Arquitectura de la UNAM, no en todos los inmuebles se pueden construir azoteas verdes; sólo en aquellos que logren soportar la carga adicional que implica la naturación, estimada en 110 kilogramos por cada metro cuadrado de azotea verde que se piensa instalar.
El costo de una azotea verde es de 1,000 a 1,300 pesos por metro cuadrado para una superficie de 100 m2, aunque varía dependiendo del tipo de inmueble, la ubicación del mismo y si éste incluye o no el sistema de riego, dice Jerónimo Reyes Santiago, biólogo-taxónomo del Jardín Botánico de la UNAM.
Una azotea verde necesita un mantenimiento mensual (para eliminar naturaleza muerta o plantas no deseadas), que implica un costo de 1,000 pesos por cada 100 m2; bastan 15 días para que una azotea de estas dimensiones se ponga verde. La vegetación ideal, según los expertos consultados es a base de cactáceas. Las azoteas verdes son costosas pero ello se debe a un problema de escala. Conforme ésta aumente y exista una mayor conciencia sobre el cuidado del medio ambiente los precios se reducirán, afirma Navas Gómez.
Esto podría hacerse realidad más pronto de lo que parece, porque la Secretaría del Medio Ambiente del Gobierno del DF impulsará la instalación de 30,000 m2 de áreas verdes por año en los inmuebles del gobierno, de acuerdo con Tanya Muller García, directora de Reforestación Urban-a de Parques y Ciclovías de esta dependencia.