OPINIÓN: ¿Cómo afectará el cierre del gobierno de EU a la economía global?
Nota del editor: Iwan Morgan es profesor de estudios sobre Estados Unidos y profesor de la cátedra Commonwealth Fund de Historia de Estados Unidos en el University College de Londres. Ha escrito varios libros sobre la presidencia y la política económica, como Age of Deficits: Presidents and Unbalanced Budgets from Jimmy Carter to George W. Bush, con el que le fue otorgado el premio literario Richard E. Neustadt.
LONDRES (CNN) —En 2011, el secretario de Negocios de Gran Bretaña, Vince Cable, lamentó que un montón de "locos de derecha" tengan de rehenes al gobierno estadounidense y a la economía mundial al rehusarse a aprobar el incremento de rutina al límite legal en la deuda de Estados Unidos.
Los líderes del mundo tal vez eviten usar la descripción franca de Cable, pero sus pensamientos probablemente sean muy similares. Estados Unidos está de nueva cuenta en medio de un tiroteo político por el presupuesto gubernamental y el tema de la deuda.
A nivel internacional, los jueguitos fiscales de Estados Unidos podrían ser particularmente perjudiciales para los países de la eurozona que tratan de controlar sus propios problemas de deuda pública y fortalecer su recuperación económica.
La inestabilidad en los mercados mundiales es lo último que necesitan países como Grecia, Irlanda, España, incluso Francia. Además, la economía de Gran Bretaña depende excesivamente de su sector financiero, por lo que las tormentas que se desarrollan en Washington podrían convertirse en una tempestad para la ciudad de Londres.
Si el embrollo de Estados Unidos resulta en una suspensión de pagos el próximo mes, será un pésimo ejemplo para los países de la eurozona que implementaron medidas de austeridad para remediar su propio endeudamiento.
Una de las consecuencias políticas puede ser el crecimiento de los partidos nacionalistas/populistas en Europa, que se aprovecharán de la conducta de Estados Unidos para legitimar los llamados a suspender los pagos de las deudas públicas de sus propios países.
Nada que destacar
No hay nada nuevo en el enfrentamiento entre la Cámara de Representantes dominada por los republicanos y el Senado demócrata respecto al acuerdo sobre el presupuesto para financiar las operaciones del gobierno durante el año fiscal 2014, que comienza el 1 de octubre.
Cada año, desde 1994 —y sin importar que un solo partido tenga el control—, el Congreso fracasa al aprobar un presupuesto antes de que inicie el siguiente año fiscal. Sin embargo, siempre ha aprobado una resolución de continuidad para destinar recursos a las operaciones del gobierno hasta que haya un acuerdo sobre el presupuesto.
Si esto no está resuelto antes de la medianoche de hoy, el gobierno de Estados Unidos experimentará un "paro" parcial que afectará a los "servicios no esenciales" (como el pago de los contratos con el gobierno federal, las prestaciones de seguridad social y otros). Ha habido 10 paros como ese desde 1981.
Todos —excepto uno— duraron un fin de semana y la mayoría de las oficinas gubernamentales estaban cerradas de cualquier forma. La excepción fue a finales de 1995 y principios de 1996, ya que duró 26 días.
Es posible que estemos por incursionar en el mismo territorio ya que los demócratas se oponen firmemente a la insistencia republicana por eliminar los recursos para Obamacare como condición para cualquier acuerdo sobre el presupuesto, además de que existe la amenaza de un veto presidencial si se implementara una medida de tal naturaleza.
Todo esto puede parecer una lucha interna local, pero las posibles consecuencias podrían tener un alcance mundial si el enfrentamiento continúa hasta mediados de octubre, cuando Estados Unidos debería elevar el límite de la deuda.
De hecho, se alcanzó el techo de endeudamiento en mayo. Desde entonces, el departamento del Tesoro de Estados Unidos ha manipulado el dinero de las cuentas del gobierno para pagar a los acreedores del país, pero las arcas están a punto de vaciarse.
Estados Unidos enfrenta la primera suspensión de pagos de la historia. Si esto ocurre, la menor de las consecuencias será una reducción de su calificación crediticia en los índices de la agencia Standard & Poors y otros.
El hecho de que los acreedores del gobierno de Estados Unidos sean principalmente gobiernos extranjeros y bancos centrales puede evitar que cunda el pánico en los mercados, pero todavía habrá serias repercusiones y perturbaciones a lo largo de Asia, Europa y América Latina.
El dinero mundial fluye
Incluso con una suspensión de pagos breve, el gobierno de Estados Unidos probablemente tenga dificultades para vender bonos del Tesoro de interés bajo a corto plazo para financiar sus operaciones.
La consecuencia probable de esto sería una mayor dependencia en los préstamos a mediano y largo plazo que requerirían de mayores tasas de interés para ser atractivos.
La Reserva Federal continúa con la aplicación de una política de dinero fácil para impulsar la recuperación que data de la época de la Gran Recesión y podría tener que elevar las tasas de interés, lo que contraría a sus preferencias expansivas y podría tener consecuencias perjudiciales para las economías estadounidense y mundial.
Si las tasas de intereses de Estados Unidos suben, el país podría convertirse en un imán para el capital mundial, lo que provocaría que los países europeos en particular se queden sin el crédito necesario para mantener su propia recuperación económica.
Lo más probable es que se evite una suspensión de pagos, pero el temor de que el paro fue inminente y la preocupación de que podría repetirse fácilmente el año próximo provocará nerviosismo en los mercados .
Los acreedores extranjeros prestan dinero a Estados Unidos voluntariamente, ya que es una apuesta segura en un mundo incierto. Pero si sus políticas disfuncionales hacen que parezca inseguro, podrían buscar en otra parte.
Estados Unidos tiene la suerte de que el euro no está a punto de volverse una moneda de reserva como lo era hace una década y el yuan chino no tiene la capacidad para desafiar al dólar.
Sin embargo, lo que el mundo necesita ahora es mayor certidumbre de parte del mayor prestador y propietario de la moneda de reserva. Sin esto, podría haber repercusiones muy dañinas al crecimiento económico mundial.
Las opiniones recogidas en este texto pertenecen exclusivamente a Iwan Morgan.