Cómo hallar un buen mentor para tu pyme

Decía Lope de Vega, poeta español, que no hay cosa más fácil que dar consejo ni más difícil que saberlo tomar, y es cierto. Para la mayoría de los seres humanos escuchar es un arte difícil de desarrollar, pues detener el mundo y prestar atención a otros requiere un especial interés.

Pero, ¿por qué recurrir a alguien si puedo buscar mejores respuestas en Internet? Gracias a los desarrollos tecnológicos, estamos estrechamente vinculados, favoreciéndose la flexibilidad a colaborar en equipos de trabajo con diversas culturas y generaciones, lo cual brinda mejores resultados.

De acuerdo a la ponencia IMEF 2013: un México de Emprendedores , el país está viviendo “el” momento para emprender gracias a la coexistencia de las condiciones necesarias para un ecosistema exitoso. Está cambiando la imagen y dejando atrás los prejuicios debido a la colaboración de cada uno de los componentes : educación; ciencia, tecnología e Innovación; Gobierno; grandes empresas, financiamiento y capital.

Aunado a dichos actores, existe una pieza clave: los mentores. El Instituto Nacional del Emprendedor (INADEM) ha consolidado la Red Nacional de Empresarios Mentores -de la cual el IMEF forma parte- bajo el precepto de apoyar mediante sus conocimientos y experiencias a los emprendedores del país. El IMEF ha invitado a ejecutivos, empresarios, catedráticos, investigadores, profesionales y técnicos, a integrarse a esta red como parte del programa de apoyo “Mover a México” que coordina el mismo INADEM.

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Sin embargo, aunque la intención es buena, es necesario estar consciente de algunos contras:

1)    Exceso de consejos: Si bien puede ser tanta la emoción del emprendedor que contagie a más de un mentor, tener múltiples opiniones puede resultar dañino para su propio juicio, de tal forma que el emprendedor no siga sus intuiciones. Hay que recordar que el equilibrio es esencial y siempre es posible agradecerle a un mentor su tiempo y seguir adelante por el propio camino.

2)    Seleccionar mal a los mentores: Aun cuando se sigue el precepto de que alguien mayor tiene mejor experiencia, es posible que algunos mentores no tengan conocimiento de la industria o de los desarrollos que están en juego para la toma de decisiones en un mundo innovador y disruptivo. Hay que aprovechar fuentes válidas para formar un mejor criterio, de tal forma que también para el mentor sea un ganar-ganar y puedan aprender juntos.

3)    Confusiones: Juzgar los consejos recibidos es válido, pero si los mentores aconsejan tomar menor riesgo o entre los mismos mentores existen diferencias de opinión, como emprendedor  es mejor tener consejeros diciendo la verdad, basando sus juicios sobre el gran camino y trayectoria que han recorrido, a tener amigos opinando -algunos sin experiencia-.

Dicho lo anterior, se debe ser consciente que no es lo mismo buscar en Internet un remedio si estamos enfermos a obtener un diagnóstico especializado, con atención personal de parte de mentores, serios e interesados en el porvenir de la empresa, ¡por eso son pieza clave!

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Las ventajas  de materializar los consejos podrían tener implicaciones para todo el país. Crear empresas que sean sostenibles a largo plazo es generar valor para México, favoreciendo la vida de millones de ciudadanos a través de empleos y riqueza.

Para ser seleccionado como mentor voluntario se debe estar dispuesto a estimular, conducir y acompañar a las iniciativas emprendedoras y potencialmente productivas, así como demostrar al menos 7 años de experiencia en un sector o área de especialidad.

El emprendedor y el mentor deben encontrar una actividad que sea indescriptiblemente apasionante, solo así podrán conectarse con impacto, transmitir el conocimiento adquirido, tener un propósito y sobre todo saber apreciar la relación para que madure a través de los años.

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En conclusión, ¿es emprendedor? Acérquese a los mentores, aproveche su sabiduría de tal forma que los errores  tengan un menor impacto o sean más fáciles de superar; sea específico en sus dudas y no pierda el equilibrio, porque de usted y los demás emprendedores depende el futuro y la confianza que hoy tiene México.

*La autora es Licenciada en Administración Financiera y Bursátil. Trabaja en clientes y mercados de PwC México y colabora activamente en el IMEF . Coordina la especialidad de asesor financiero patrimonial del Centro de Certificación y Desarrollo Profesional y es vicepresidente de comunicación del Comité Técnico Nacional de Emprendimiento. Su correo es  alejandra.barroeta@mx.pwc.com