Nota del editor: Fernanda Diez es autora, economista y abogada por la Universidad de la Américas; es Directora de Relaciones Institucionales del Centro de Estudios Espinosa Yglesias (CEEY).
Las últimas semanas el mundo ha sido espectador de la tragedia desarrollada
Al final, el "no" solo sirvió para que Europa y Grecia renegociaran los tiempos de pago...
La tragedia griega pasó del género literario a la realidad. Durante la función el público observa avances, mientras los actores se desgarran las vestiduras y el desenlace, sin importar lo narrado, siempre termina mal. Lo mismo ocurrió con el referéndum: no importó la decisión que tomó el pueblo heleno, pues el coro europeo dictó, al final, medidas draconianas.
La trama se cumple. Estamos en medio de una tragedia de la cual aún ignoramos el final. Sólo dan ganas de llorar.
En México, por otro lado, tenemos un género diferente: la tragicomedia.
En efecto, se trata de una tragedia, pero reímos de ella. Se fugó el Chapo Guzmán y recurrimos a la broma, los "memes" y a comentarios jocosos.
No soslayamos el silencio omnímodo en la realización del túnel, ni olvidamos que expertos de la UNAM instruyeron al personal del penal para utilizar la tecnología del Radar de Penetración Terrestre (GPR)... la cual nadie utilizó.
Proponemos, entre sorna y anhelo, al Chapo como nuevo secretario de comunicaciones. Así, podría reconstruir
Surgen las teorías de la conspiración y nadie deja de señalar la “coincidencia” que en dos de los peores escándalos de la presente administración (la Casa Blanca y el Chapo),
Volvemos todo broma... pero en ella nos dolemos de reconocer cómo el Estado de Derecho no existe en nuestro país. ¿El colmo de la burla? Que se escapara justo "el día del abogado".
El escarnio se vuelve mundial y nuestro odiado
. Recordamos dolores pasados, como elAsí, mientras en la tragedia griega, desde el inicio se espera un terrible desenlace, en la tragicomedia mexicana y desde el inicio, esperamos cambios espectaculares, lograr el campeonato del mundo (jugar como nunca y perder como siempre), cambiar la historia en un sexenio.
Los ejemplos sobran: "sacaré a las víboras tepocatas en 15 minutos", Vicente Fox; "defenderé el peso como un perro", José López Portillo; "seré el presidente del Empleo", Felipe Calderón; “Mover a México”, Enrique Peña Nieto…
La trama de desenvuelve y el público espera final de telenovela... pero lo que se viene es drama puro. Así, de forma involuntaria, trocaremos el desastre en tragicomedia, burlándonos de todos, porque para no llorar, reímos a carcajadas.
Las opiniones de Fernanda Díez Torres son a título personal y no representan necesariamente el criterio o los valores del CEEY o de CNNMéxico.