Bolivia denuncia a Japón y EU de intentar bloquear acuerdos en COP 16

En los primeros días de negociación de la cumbre climática de Cancún, los acuerdos internacionales se comienzan a complicar.
Bolivia ha denunciado que países como Japón, Rusia, Nueva Zelandia y Australia desean cerrar las puertas a una segunda fase del Protocolo de Kyoto, y que Estados Unidos condiciona el financiamiento a los países que firmen sus acuerdos.
Si bien las autoridades mexicanas y Naciones Unidas advirtieron que en Cancún no había condiciones para la firma de un nuevo acuerdo vinculante , Pablo Solón, embajador boliviano ante la ONU y el negociador de la delegación de Bolivia, aseguró que los japoneses han aprovechado el foro internacional para presentar un documento en el que rechazan tajantemente la posibilidad de una segunda fase del único acuerdo obligatorio que se ha firmado hasta ahora: el Protocolo de Kyoto.
Hasta ahora, dicho documento no ha sido difundido en los canales que utiliza la Convención Marco de la ONU sobre Cambio Climático en Cancún.
Bolivia es uno de los países que en los foros climáticos han impulsado una reducción de emisiones de 40% a mediano plazo y 80% a largo plazo , pues aseguran que, de lo contrario, las temperaturas promedio tendrían un incremento de 4 grados centígrados para el 2020.
“Para nosotros el tema de financiamiento es importante obviamente, pero si no hay reducción de emisiones no importa la cantidad de plata que le den a Bolivia, jamás podremos reponer nuestros glaciares en los Andes. ¿Qué va a pasar con los países que son Islas y que quedarán sumergidas bajo el océano?”, dijo Solón al término de la primera conferencia de prensa de la delegación boliviana ante medios internacionales.
También acusó al gobierno estadounidense de haberles retirado una ayuda de tres millones de dólares, por no haber firmado el Acuerdo de Copenhague que Estados Unidos desea revivir en la COP 16 .
"Esto es inadmisible en un proceso de negociación y es una actitud soberbia e imperial por parte de Estados Unidos, anunciar públicamente de que todo aquel que no esté con él lo va a sancionar", dijo.
No obstante, hay mecanismos que están sobre la mesa de negociación, como el relacionado al freno a la deforestación -conocido como REDD- , cuyos avances se podrían limitar porque Bolivia se opone a que los países reciban financiamiento con base en la cantidad de dióxido de carbono que sus bosques puedan captar.
“Hay quienes dicen que para hacer el mecanismo de bosques primero tenemos que valorar en términos monetarios los servicios ambientales de los bosques, es decir, cuántas toneladas de CO2 captura este bosque y en función a eso ver por tonelada 10 dólares, si es un millón de toneladas, un millón de dólares”, dijo.
“Nosotros estamos en contra de esa lógica. Nuestra lógica es cuánto necesitamos para preservar el bosque. Cuánto necesito para, por ejemplo, en el caso de Bolivia, pueda apagar incendios en los bosques, helicópteros, carros bombero, fuentes alternativas de trabajo para los que vienen y entran a talar los árboles. Mejor infraestructura y control, pero ahí no estoy hablando del valor bosque”.
En conferencia de prensa, Solón anunció que su país busca impulsar la creación de una Corte Internacional de Justicia Climática, en la que se pueda sancionar a los países que incumplan con los compromisos signados en los acuerdos internacionales, pues dijo, “lo que se pierden son vidas”.