Un satélite muestra la devastación por las inundaciones en Tailandia
Las fotos satelitales tomadas antes y después de las recientes inundaciones en la capital de Tailandia, muestras la devastación de su paisaje.
La primer imagen del país del sudeste asiático fue tomada en noviembre de 2010 y es contrastada con una nueva toma del 1 de noviembre de 2011.
Capturadas con el Espectroradiómetro de imágenes de media resolución de la NASA, estas imágenes muestran a Tailandia (a la izquierda), Cambodia (al centro) y Vietnam (al extremo derecho).
A unos 100 kilómetros de la capital tailandesa, Bangkok, se encuentra la antigua ciudad de Ayutthaya.
Fundada en el siglo XIV entre el afluente de los ríos Chao Phraya, el Lopburi y Pasak, fue un importante centro de comercio que incluso fue apodada la Venecia del oriente. Hoy su apodo tiene un nuevo significado. Sus calles se han convertido en pequeños ríos y los campos de cultivo han quedado completamente bajo el agua, situación que se puede observar en las imágenes.
La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza estima que unas 200,000 hectáreas de cultivo han sido afectadas por las inundaciones en Tailandia.
La economía urbana también ha sido severamente afectada, con unas 1,000 fábricas damnificadas.
El país es un centro manufacturero para cientos de compañías electrónicas; el IUCN prevé que las pérdidas económicas por el desastre superarán los 3,000 millones de dólares.
En las afueras del norte de Bangkok, el aeropuerto Don Muang, que ahora solo maneja los vuelos domésticos de Tailandia, tuvo que suspender sus actividades luego de que las pistas quedaran completamente bajo el agua.
Afortunadamente, el aeropuerto internacional Suvarnabhumi, que fue inaugurado en 2006, ocupa un área que solían ser terrenos pantanosos, por lo que fueron construidos diques que hasta el momento le han permitido seguir operando.
El IUCN asegura que las preservar los estanques es importante para almacenar el agua que podría ocasionar las inundaciones, y que junto con los pantanos y ríos pueden limitar también sus impactos.
“Es un clásico ejemplo de mala planeación urbana”, dijo Ganesh Pangare, director del programa de agua del IUCN en Asia.
“Las vías de evacuación naturales han desaparecido, así como los estanques y las plantas a su alrededor que absorbían el agua. Esto es una llamada de atención contra el crecimiento urbano sin planeación”, sentenció.