Los edificios de Abu Dabi 'visten' una cubierta para guardar energía
Al diseñar edificios sustentables y modernos en los Emiratos Árabes Unidos, los arquitectos toman elementos de una vieja tradición del diseño árabe.
Un sistema de sombras de alta tecnología que funciona en la fachada del Al Bahar Towers en Abu Dabi, se inspiró en el mashrabiya, un enrejado de pantallas que son comunes en la arquitectura árabe y sirven para difuminar la luz solar y mantener frescos a los edificios sin bloquear la iluminación natural.
“No permitir que los rayos del sol lleguen directamente a la superficie del edificio, causando sobrecalentamiento y un intenso resplandor, era un concepto simple”, dijo Abdulmajid Karanouh, el arquitecto del edificio.
“Por lo mismo el usar el mashrabiya, inspirado en el pasado y la naturaleza, no fue gran ciencia”.
La mayoría de los costados de los edificios de 25 pisos están envueltos por las pantallas que se acomodan en una red de patrones geométricos que se repiten y se controlan por medio de una computadora para responder a los movimientos del sol, abriéndose como paraguas cuando les da el sol.
Las pantallas se doblan para guardarse y el mecanismo automático se apaga todos los días cuando se oculta el sol. Los lados norte de los edificios nunca reciben los rayos del sol directamente por lo que no tienen pantallas.
En Abu Dhabi, los rayos solares pueden calentar la superficie externa de las ventanas hasta 90 grados centígrados. Las pantallas permiten que el edificio permanezca fresco, reduzca el brillo y deje pasar la luz natural.
Al usar este método, los edificios requieren menos iluminación artificial y disminuyen en un 50% el uso del aire acondicionado.
Con el sol desértico brillando vibrantemente sobre las ciudades del golfo Pérsico, la energía es un factor importante en estas ciudades. Pero el polvo y la arena del desierto hacen menos prácticos a los tradicionales paneles fotovoltaicos.
Karanouh dice que hasta una delgada capa de polvo puede reducir la eficiencia de los paneles solares a la mitad, y un mantenimiento adecuado significaría una limpieza constante usando artefactos que extraigan agua fresca, la cual es escasa en este país árido.
“Puedes pensar que gastas demasiada energía para desalar el agua y llevarla a donde necesita estar y después limpiar los paneles, descubrirás que esa energía puede igualar o hasta exceder la energía que sacas de los paneles fotovoltaicos”, dijo él.
En Qatar, la Torre Doha, un impresionante edificio cilíndrico, fue diseñada en la misma línea, está cubierto por una pantalla enrejada que tiene un patrón de varias capas construido de aluminio y vidrio.
Ambas estructuras fueron reconocidas como los mejores edificios de 2012 por el Consejo de Edificios Altos y Hábitats Urbanos con base en Chicago, EU, que premia a la arquitectura sustentable.
Normalmente, los Emiratos Árabes Unidos no son considerados un líder en el combate contra el cambio climático – tiene uno de los niveles más altos de emisiones de carbono per cápita en el mundo, de acuerdo al Banco Mundial – pero Abu Dhabi en años recientes llamó la atención por sus proyectos innovadores de edificios de energía renovable.
El más notable es Masdar City, la publicitada ciudad que aún está en construcción, fue originalmente anunciada como un área neutral de carbono, pero ahora busca la sustentabilidad ambiental. El área tiene características verdes como una planta solar de 10 mega watts y una torre de viento de 45 metros de alto que ayuda a regular las temperaturas del aire en la plaza pública al controlar su movimiento.