Costa Rica se convierte en el primer país de América en prohibir la caza
Los animales de Costa Rica estarán protegidos gracias a una nueva ley propuesta e impulsada por los ciudadanos del país, la cual prohíbe la caza deportiva de cualquier especie de la nación.
La Ley de Vida Silvestre, aprobada esta semana, es la primera legislación que fue presentada al Congreso por ciudadanos y no por diputados. La norma fue llevada ante el poder legislativo con el respaldo de 177,000 firmas recogidas por la Asociación Preservacionista de Flora y Fauna (Apreflofas).
La iniciativa fue aprobada este lunes por el Congreso del país con 42 votos de los 57 diputados presentes en la sesión, y convierte a Costa Rica en la primera nación del continente en proteger a sus especies de los amantes de la caza.
Según datos del Sistema Nacional de Conservación (Sinac) del país, el año pasado se concedieron 1,296 permisos para cazar en Costa Rica, el 81% de ellos para matar o capturar aves canoras. Así como 171 licencias de caza mayor y 77 para cazar mamíferos menores.
Para que entre en vigor falta la firma de la presidenta Laura Chinchilla y a partir de ese momento, Costa Rica no dará más licencias y sus ciudadanos no podrán cazar o tener animales silvestres como mascotas. La caza únicamente será permitida en casos de subsistencia, investigación científica y para el control de especies de sobrepoblación.
La nueva ley estipula que quien cace un animal en el país será multado con hasta 3,000 dólares y dependiendo de la especie y podría incluso ser condenado de dos a cuatro meses de prisión.
Los costarricenses tampoco podrán tener animales silvestres como mascotas, quien viole esta ley deberá pagar una multa de entre 600 y 1,200 dólares.
La ley también sanciona la exportación y el tráfico de cualquier especie de flora o fauna silvestre, a la vez que crea un Registro Nacional de Vida Silvestre, en el cual los zoológicos y reservas, públicas y privadas, deben inscribir los especímenes que mantengan en cautiverio, tras presentar un plan de manejo.
En el Congreso de Costa Rica la iniciativa tuvo el apoyo de todos los partidos políticos a excepción del Movimiento Libertario (ML, derecha), que se opone a la prohibición de la práctica.
El más férreo enemigo de la propuesta fue el diputado Ernesto Chavarría, quien llegó a afirmar que la ley pone en igualdad de condiciones los derechos de los seres humanos y los de los animales. Para Chavarría, con esta ley se crea en Costa Rica el "animalicidio".
Su posición no fue compartida por otros legisladores como Claudio Monge, del Partido Acción Ciudadana (PAC, centroizquierda), para quien "la cacería deportiva no es otra cosa que una matanza de animales indefensos, con el único objetivo de divertirse".
Costa Rica ha buscado convertirse en un país amigable con el medioambiente, desde hace más de una década está prohibida la utilización de animales silvestres en circos y espectáculos en el país.
Una ley similar fue aprobada en 2008 en Chile, donde el gobierno creó un santuario para proteger a las ballenas que llegan a su territorio en contra de su cacería.