Paul Rosolie dice que fue comido vivo por una anaconda verde gigante, la serpiente más grande y poderosa del mundo.
El herpetólogo, naturalista y autor se presentó como presa a la serpiente después de ponerse un traje reforzado especial con un casco y dispositivos para medir sus signos vitales, según lo que dijo en un comunicado de prensa en el
.“Me atrapó de la cara”, dijo. “Lo último que vi fue su boca completamente abierta antes de que todo se pusiera negro. Mientras esto ocurría, me envolvió y me tomó de los pies. Sentía que el traje se rompía. Se sintió como si mis brazos fueran sacados de sus articulaciones”.
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Rosolie no cuenta mucho sobre la experiencia en el occidente del Amazonas, que fue filmada por adelantado, porque quiere que todos sintonicen el programa Eaten Alive de Discovery Channel a las 21:00 horas tiempo del este de Estados Unidos (20:00 horas tiempo de la ciudad de México) del próximo domingo.
Sin embargo, dice que pasó una hora dentro de la serpiente, lo que fue difícil porque es claustrofóbico.
pero dice que la serpiente está bien. “No hubiera hecho esto si hubiera existido una posibilidad real de lesionar o estresar a la serpiente”, dijo.
Ahora, quiere encontrar a la mayor anaconda.
“Durante una expedición anterior en el Amazonas, encontramos una anaconda de 7.9 metros que pesaba cientos de kilogramos”, dijo. “La serpiente para el proyecto Eaten Alive era grande, aproximadamente de 5.4 metros, pero sabemos que hay anacondas más grandes allá afuera”.