Miden el daño cerebral de futbolistas y boxeadores golpeados en la cabeza
Una de las molestas realidades respecto a las contusiones es que su impacto en el cerebro es imposible de medir. No hay estudios de resonancia magnética, rayos X o exámenes que puedan describir en qué nivel causa un daño cerebral. Esto podría cambiar de acuerdo con un pequeño estudio presentado en la reunión anual de la Sociedad Radiológica de Norteamérica.
"Es un avance emocionante, aunque prematuro, en una lesión que hoy es considerada invisible", expuso el autor principal Alexander Lin, profesor asistente de radiología en el hospital Brigham and Women's, en Boston.
Los investigadores examinaron los cerebros de cinco atletas usando una tecnología llamada espectroscopía de resonancia magnética. Lin y sus colegas escanearon a los ex atletas —todos con historial de repetidos traumatismos en la cabeza— y se sorprendieron al descubrir marcados incrementos en químicos que suponen están relacionadas con las contusiones cerebrales: glutamato y colina.
"Observamos cambios en todos los jugadores", dijo Lin. "(Los altos niveles de) colina son una señal de tejidos dañados y el glutamato es neurotóxico en niveles altos, algo que, pensamos, puede ser el resultado de repetidas lesiones en la cabeza. Estamos tratando de entender qué papel juegan en la fisiología (del traumatismo craneoencefálico)".
"El sujeto con la mayor acumulación de traumatismos craneales, que mostraba los mayores síntomas cognoscitivos fue el que tuvo el más alto nivel de cambios neuroquímicos", explica el estudio.
Pero los expertos dicen que una mayor comprensión y un análisis a un mayor número de sujetos son necesarios antes de elevar las esperanzas en la espectrografía MR para el diagnóstico de contusiones cerebrales.
"Estamos aún lejos de usar la espectroscopía para determinar definitivamente si daños menores en la cabeza pueden causar lesiones cerebrales en atletas jóvenes", dijo el doctor Michael Brant-Zawadzki, director médico ejecutivo del Instituto de Neurociencias en el hospital Hoag Memorial.
Las personas que participaron en la investigación incluyeron jugadores de futbol americano, luchadores y boxeadores que han tenido contusiones cerebrales diagnosticadas o una acumulación de golpes menores llamados sub contusiones. Los cinco atletas exhibían síntomas asociados a una condición llamada encefalopatía traumática crónica (ETC).
La ETC se manifiesta como ovillos color café oscuro en el cerebro, que están asociados con depresión, pérdida de la memoria y cambios dramáticos de humor.
Actualmente, la ETC puede ser diagnosticada sólo a través de biopsias póstumas de los cerebros de los pacientes. Lin espera que otras investigaciones más amplias, usando espectroscopía eventualmente, permitan a los científicos diagnosticar ETC (y contusiones cerebrales) con escaneos cerebrales mientras los jugadores aún están vivos.
"Sabemos que algo anda mal dentro de los cerebros de un considerable número de atletas de alto nivel en deportes de alto impacto ", dijo Chris Nowinski, codirector del Centro para el Estudio de la Encefalopatía Traumática de la Universidad de Boston, que estuvo involucrada en este estudio. "Con sólo cinco casos, ciertamente no podemos extraer ninguna conclusión, pero esto nos lleva un paso más cerca para identificar cuál es el problema".
Lin también se mostró cautamente optimista: "A medida que ampliamos el estudio, estamos convencidos de que encontraremos un patrón único de las lesiones en la cabeza repetitivas".