Una nueva tendencia en muebles propone hacer más divertido el sexo
En poco tiempo las camas podrían perder su condición sexual porque un creciente grupo de diseñadores industriales está apostando al mercado erótico y han lanzado propuestas de mobiliario que prometen una mejor experiencia sexual.
"Hay que sacar el erotismo de una sola habitación y de un sólo mueble (la cama)", explica Andrés Amaya, cofundador, junto con Xanath Lammoglia, de Bala Studio.
Este despacho lanzó su colección de mobiliario erótico, enfocándose en todas las tendencias del mercado como muebles para parejas gays.
“El objetivo es romper con la monotonía y fomentar el desarrollo de las fantasías eróticas ”, asegura Aurelio Vázquez, director de Din Interiorismo.
El mobiliario erótico pretende reconquistar los espacios íntimos a través de formas curvas y rectas que brinden la visión y sensación del desnudo humano.
La mayoría de las piezas del mobiliario erótico tiene influencias y una trasposición amatoria del mundo árabe, de la India clásica, de China y de Japón.
La elegancia y la sensualidad de la curvatura de este tipo de muebles permite revolucionar el concepto del mobiliario erótico, llevándolo a un nivel más alto que brinde bienestar sexual en las parejas, acentúa Al Vitaro, presidente de Zen by Design, despacho dedicado a este tipo de mobiliario, desde Scottsdale, Arizona.
La tecnología de que disponen hoy arquitectos y diseñadores ha posibilitado una mejor fabricación de muebles, sobre todo en este ámbito erótico, que legitima la ergonomía y detonan fantasías en las relaciones sexuales.
Esa fusión de conocimientos tecnológicos y una mayor conciencia sobre el cuerpo humano, físico y espiritual trae como resultado el diseño de productos ecológicos y no tóxicos, perfectamente adaptables al cuerpo.
Sin embargo, la utilización de materiales resistentes como los sintéticos implica altos costos tanto de producción como en el mercado, por esa razón la tendencia es crear mobiliario para hoteles o clubes.
Este nicho de negocio aún no ha sido explotado lo suficiente. “La existencia de muebles eróticos se ha mantenido en el ámbito de lo privado. El mercado se ha restringido al extracto social con mayores remuneraciones económicas”, explica Al Vitaro.
Los diseñadores coinciden en que este segmento de muebles es todavía imperceptible en el mercado, por lo mismo la competencia es casi nula y las propuestas son pocas.
“Todavía no hay una identidad erótica dentro del ambiente doméstico. Esto explica el letargo del mercado y las pocas propuestas de diseñadores de mobiliario de este tipo”, comenta Andrés Amaya.
Aunque incipiente, se percibe un crecimiento en los canales de distribución, esencialmente por internet”, asegura Aurelio Vázquez, de Din Interiorismo.