La sal está oculta en los alimentos; descubre cómo evitar su exceso
Sí, aún puedes tomarte esa botella de cerveza, pero mejor aléjate de ese tazón de pretzels. ¿Vas a saltarte eso y ordenarás directamente del menú? ¡Bien! ¿Qué vas a comer?
Si estás controlando tu consumo de grasa, entonces será un sándwich de pechuga de pollo a la parrilla y ensalada, en lugar de papas fritas. ¿Con qué aderezo? ¿El italiano ligero? Suena excelente.
Ahora contemos tu consumo de sodio : el sándwich te dará alrededor de 1,300 miligramos (380 miligramos sólo en el pan), y el aderezo te aportará 480 miligramos. La cerveza es una ganga por sólo 11 miligramos.
No es sólo el salero en la mesa —las comidas que podrían verse angelicales en lo que respecta a las calorías, carbohidratos y contenido de grasa, están llenas de sal. Esa es una prohibición para las personas que están tratando de apegarse a las nuevas directrices alimenticias del gobierno estadounidense que sugieren un consumo máximo de 2,300 miligramos de sal para el adulto saludable y de 1,500 miligramos para los afroamericanos, personas mayores de 51 años, y aquellos con un historial de hipertensión, diabetes o problemas en el riñón.
El consumo excesivo de sal está ligado a problemas con la presión arterial y un incremento en el riesgo de apoplejía, ataques al corazón, enfermedades del corazón y falla renal. Pero, ¿cómo puede la gente normal excluirla de su dieta y aún tener una vida deliciosa?
En un mundo ideal, cocinaríamos todo desde el principio. Si tienes tiempo y acceso a productos frescos qué suerte. En lugar de usar sal para resaltar el fabuloso sabor natural de los vegetales, carnes, pescados y granos, experimenta con hierbas y especias. Los jugos de limón y de lima, así como todos los tipos de vinagre agregan una nota brillante a muchas comidas, y tal vez te puedan alejar de los aderezos, salsa de soya, salsa inglesa, y otros líquidos con alto contenido de sodio.
Añadir especias es bueno cuando quieres ampliar el sabor. Coloca el salero al fondo de la alacena y coloca las nuez moscada, pimienta, comino, paprika y orégano al frente. Una vez que conozcas sus características individuales, mézclalas en un bote para que las tengas listas para espolvorear en un segundo.
Y no te olvides del ajo, la cebolla y los cebollines, que contienen una gran cantidad de sabor. Los chiles también están llenos de sabor, y con el calor suficiente, nunca extrañarás la sal.
Es un proceso
Para muchos de nosotros, no existe tiempo para ir de compras, cortar y cocinar todo desde cero. Los alimentos procesados constituyen la mayor parte de la dieta de muchas personas, pero da un vistazo al contenido de sodio de estos productos:
- Crema de cacahuate Peter Pan: 140 mg por dos cucharadas.
- Pan blanco Wonder: 150 mg por rebanada.
- Salsa de tomate Heinz: 190 mg por cucharada.
- Rebanada de queso americano Singles de Kraft: 270 mg.
- Aderezo Ranch de Hidden Valley: 260 mg por porción.
- Salsa italiana tradicional Prego: 480 mg por media cucharada.
- Pollo al ajo o ravioles con queso de Lean Cuisine: 620 mg por porción.
- Sopa de fideos con pollo de Campbell's: 890 mg por porción.
El hombre no puede vivir sin pan, salsas y pizza, ¿verdad? Así que ¿qué se puede con una comida cuando hay poco tiempo? Las versiones bajas en sodio de algunos alimentos son, por supuesto, una buena apuesta, pero no siempre reducirán el contenido tanto como debieran.
Las directrices del gobierno estadounidense sugieren usar platos más pequeños para que las porciones parezcan más grandes, e incrementar el consumo de granos integrales, vegetales, frutas y lácteos bajos en grasa.
Algunos consejos para que no sientas el sacrificio:
— Olvídate de los condimentos, o al menos lo que contengan sal. En lugar de catsup, agrega una rebanada de tomate y un chorrito de vinagre. Si quieres darle sabor a tus papas (horneadas y sin sal, por favor) piensa en rociarles un poco de la mezcla de especias que preparaste.
— Aprende a amar los granos no procesados . La avena (mantente alejado de las variantes empacadas) puede parecer un fastidio, pero puedes hacerla sorprendentemente sabrosa si le agregas comino, cilantro o nuez moscada. El arroz integral puede ser tu mejor amigo – sólo prepara una gran cacerola el fin de semana y sírvela en la semana. Comer más de estos granos enteros significa que necesitarás menos alimentos procesados.
— Si no puedes conseguir vegetales frescos, elige las versiones congeladas en lugar de las enlatadas, que a menudo están procesadas y empacadas con más sal. Trata de llenar tu plato con frutas y verduras alejar la comida alta en sal.
— Date el tiempo. Es importante. Reúnete con amigos, familiares y vecinos, e intercambia sopas y salsas. Cada persona debe preparar una cacerola gigante de sopa, salsa o estofado – sin sal- y dividirla con los demás. De este modo nadie se cansa de comer lo mismo cada día y estarás más sano por mucho tiempo.