La televisión y los videojuegos, fuentes de malas palabras para los niños
Las malas palabras en los programas de televisión y en los videojuegos pueden llevar a los adolescentes a adoptar un lenguaje soez y también pueden influir en el comportamiento agresivo, según un estudio publicado este lunes en la revista Pediatrics .
“No lo sabíamos antes y estaba realmente sorprendida porque tenemos todas estas clasificaciones por groserías en la televisión, el cine y los videojuegos”, dijo la autora del estudio Sarah Coyne, doctora y profesora asistente de vida familiar en la Universidad Brigham Young, e investigadora de medios de comunicación y desarrollo humano.
“Creo que como sociedad nos hemos vuelto muy laxos en lo que se refiere a las groserías”, añadió. “Creo que en parte es porque lo escuchamos en todos los medios”.
Los investigadores encuestaron a 223 jóvenes de entre 11 y 15 años de una escuela secundaria, de los cuales 135 eran niñas.
Los estudiantes fueron interrogados sobre sus programas y videojuegos favoritos, incluyendo la frecuencia con que jugaban y veían la televisión. Se les preguntó la cantidad de groserías a las que pensaban que estaban expuestos y sus sentimientos acerca de las groserías . Los investigadores determinaron que la exposición y su postura sobre las malas palabras se relacionaban significativamente.
Coyne dijo que las estadísticas apuntan a un “efecto de filtración”.
“Tal vez miras televisión, juegas videojuegos con muchas malas palabras y de alguna manera te vas acostumbrando a eso”, dijo. “Te vuelves más insensible a ellas, las aceptas más, luego comienzas a utilizarlas en tu vida y entonces, de alguna manera, muestras una falta de respeto hacia las personas”.
El estudio encontró que la agresión podía ser mostrada físicamente , en forma de golpes, patadas o puñetazos. Sin embargo, también puede ser mostrada en forma de agresión en las relaciones, como participar en chismes o difundir rumores acerca de alguien.
“Creo que los padres deben ser un poco más conscientes de lo que hay en los programas que los hijos están viendo, y en los videojuegos que están jugando”, añadió Coyne. “Podrían ser un poco más vigilantes en cuanto a la exposición a las groserías”.
Agregó que la televisión y los videojuegos tienen que estar etiquetados con mayor precisión respecto a las malas palabras.