Las mamás con depresión despiertan más a sus bebés
Investigaciones sugieren que si la madre se encuentra deprimida, es más propensa a despertar a su bebé en medio de la noche, incluso si este se encuentra bien. Los expertos dicen que si esto sucede ocasionalmente, no hay problema. Pero si ocurre frecuentemente, puede llevar a problemas en el desarrollo.
En este estudio, publicado en la revista Child Development, investigadores de la Universidad Estatal de Pensilvania observaron a 45 familias durante una semana. El rango de edad de los bebés varió de un mes a 2 años. Las mamás fueron cuestionadas sobre una variedad de asuntos, desde su estado emocional hasta los patrones de sueño de su hijo.
También se instalaron cámaras para observar la forma en la que las madres interactuaban con sus bebés a la mitad de la noche.
Esto es lo que encontraron: Las mamás con niveles más altos de síntomas de depresión tendieron a responder con más frecuencia a sonidos menores, despertando a su bebé y amamantándolo (aunque no tuviera hambre) o a levantar al niño durmiendo y ponerlo en la cama con ellas . Esto puede ser un círculo vicioso.
“Mientras más tiempo de sueño te falte, es más probable que te sientas deprimido”, dice el autor principal Douglas M. Teti, profesor de Desarrollo Humano, Psicología y Pediatría en la Universidad Estatal de Pensilvania.
Pero antes de culpar a las madres, Teti señala que hay muchas otras cosas en juego, incluyendo las dinámicas familiares.
“Lo que pasa en la noche con el bebé es una función de otras cosas”, dice. Las peleas maritales pueden ser uno de estos problemas. Si las cosas no están muy bien con papá , “las mamás pueden querer el confort del contacto y la seguridad emocional”, dice Teti.
Pero para obtener el confort y la seguridad, otras cosas se pueden estar sacrificando .
En algunos estudios se ha encontrado que a los niños que constantemente no logran tener una buena noche de sueño, les cuesta más trabajo regular sus emociones. (Tiene sentido. Como cualquier padre te diría, hay pocas cosas peores que un bebé irritable).
Y las mamás (y también papás) que no tienen una buena noche de descanso pueden ser menos sensibles a las necesidades de sus hijos y no poner los límites adecuados. (Levanta la mano si alguna vez has dejado a tu hijo ver media hora más de televisión para poder recostarte en el sillón).
Una constante falta de sueño puede hacerle difícil a los niños vincularse con sus padres, y con el resto del mundo.