Recién graduados: una guía práctica sobre qué hacer al salir de la escuela
Los recién graduados tanto de preparatoria como de universidad pueden perderse fácilmente en las complejidades de la administración del dinero, planeación y ética de trabajo. Pero empecemos con el problema más grande. En lo que se refiere a deslices comunes, las redes sociales son un agujero negro virtual.
Pasos en falso en las redes sociales
A estas alturas, los estudiantes de último año ya han escuchado las advertencias: que lo que publican en línea, casi nunca es completamente privado. ¿No quieres fotografías vergonzosas o información sobre tu último rompimiento en el anuario de la escuela? Bueno, imagina que Facebook y Twitter son un anuario para todo el mundo. Y si eres un recién graduado cuya fotografía de perfil revela un embudo, una bebida espumosa y la costa de Jersey (o el Lago Havasu… o Daytona Beach… o un crucero en el Caribe), hay una posibilidad de que la empresa para la que quieras trabajar lo vea.
Pero mientras que algunas fotografías de Facebook y publicaciones en los muros pueden ser eliminadas, los estudiantes no tendrán la oportunidad de eliminar sus tuits públicos. Son exactamente eso: públicos, y ahora están programados para quedarse de esa manera para siempre.
La Biblioteca del Congreso de Estados Unidos está guardando un archivo de Twitter para la posteridad. Y sin importar quién eres, cuántos años tienes, o lo que has escrito en 140 caracteres o menos, cada tuit público en la historia está siendo archivado. ¿Eso significa que un potencial empleador/esposo/hijo/director de admisiones puede leer lo que escribí en 2009? Sí. ¿Puedes recuperar tus tuits? No. Lo único que puedes hacer es que tus tuits futuros sean privados; una función que evitará que sean archivados. Pero todo lo que ha sido compartido públicamente quedará de esa manera.
No hacer nada en verano
Por supuesto, las redes sociales no son la única zona de peligro para los graduados. Otros obstáculos potenciales son las codiciadas vacaciones de verano. Entre la secundaria y preparatoria, puede que te hayas relajado, que hayas descansado, trabajado sólo cuando era necesario (o conveniente) y disfrutado de la piscina. Sin embargo, los recién graduados de la universidad que siguen con este patrón están casi asegurando perder la oportunidad de obtener uno de los trabajos disponibles para quienes comenzaron a buscar antes de que terminar sus estudios.
Y si estás dejando la preparatoria para ir a la universidad, no quieres perderte cuando llegues al campus.
Tienes que aprender cómo registrarte para las clases. Los campus más grandes tendrán rutas de autobuses que no conocerás, y hay muchas cosas en tu recámara y baño que no serán incluidas en un dormitorio. Así que tomar un poco de tiempo para preparar el terreno en la universidad, hacer compras adelantadas o simplemente trabajar en un plan de transición, rendirán frutos; y te darán más tiempo para ir a las máquinas de helados mientras tus compañeros de cuarto van a hacer sus compras.
Mal manejo de dinero
¿Tienes algunos billetes? Ahórralos. Cualquier estudiante universitario puede decirte que gastas efectivo más rápidamente de lo que planeas. Desde gastos en lavandería hasta aperitivos en la noche, cuando los comedores ya están cerrado, vas a necesitar dinero. Y no quieres acumular deudas en tarjetas de crédito, además de los préstamos estudiantiles.
De hecho, si puedes salir de la universidad sin ninguna deuda de tarjetas de crédito, tendrás una ventaja. Un error que los graduados cometen después de la universidad es sumergirse en deudas que no son necesarias.
Incluso si tienen la suerte de obtener un trabajo justo después de salir de la escuela, una mala idea es comprar un automóvil nuevo que no necesitan. ¿Por qué? Porque tener que hacer el pago de un automóvil además del de la renta es como tener dos rentas.
Una buena idea antes de que compres, rentes o arrendes cualquier cosa: comprende tus ingresos. Tu empleador probablemente necesitará que aportes una parte de tu sueldo para la cobertura del seguro de salud. Así que planea tener un compañero de casa o dos, y revisa unos cuantos cheques de tu sueldo para que tengas una idea de lo que puedes pagar antes de que vayas a comprar.
Falta de voluntad para trabajar
No descartes hacer una pasantía o un empleo con un bajo salario. Debido al estado actual de la economía, los graduados a menudo tienen que moderar sus expectativas. “Tu primer trabajo debe darte conocimiento y experiencia que servirá como un ladrillo para tu trabajo soñado”, escribe Scott Sholtes de AlumniAgent.com.
No pienses que desperdiciaste tu educación porque no puedes empezar con un salario de 60,000 dólares; tienes que ser paciente, y a menudo trabajar duro, para llegar a ese lugar.
Y hablando de trabajo duro, prepárate para hacerlo. Ya sea que el siguiente paso sea la universidad, escuela vocacional, o entrar a la fuerza laborar, va a haber más gente y más competencia . Los estudiantes que están listos para comerse el mundo también podrían tener que hacerse cargo de tareas como limpieza, programación, clasificación o investigación. Una de nuestras presentadoras de noticias comenzó en el periodismo vaciando los botes de basura en una estación de radio. Otros bajaban el TelePrompTer y entregaban guiones a los productores. Aspirantes a pilotos privados a menudo lavaban los aviones; aspirantes a guardabosques a menudo cobraban los peajes. No es glamoroso, pero ayuda a las personas a ir a donde quieren.
De hecho, el glamour muy pocas veces llega a la vida inmediatamente después de la graduación. Por supuesto, una pequeña fracción de atletas pueden volverse profesionales, una pequeña fracción de artistas puede tener un papel en algún lugar. Pero, para el 99.9% de los graduados, el éxito viene después . Planear eso puede ayudar a suavizar el camino después de la graduación, y a convertirlo en una mejor historia de éxito, sin duda alguna.