La OMS ve en dos vacunas, el primer paso para combatir el virus H7N9
Existen dos vacunas que aún no ha sido autorizadas pero que tendrían las características necesarias para ayudar a crear los agentes inmunizadores contra la nueva cepa de influenza aviar H7N9, que ya ha infectado a 77 personas en China y causado 16 muertes confirmadas.
Las dos vacunas existían antes de este brote y se habían desarrollado como parte de la investigación sobre los diferentes tipos, cepas y mutaciones de los virus de gripe , explicó en rueda de prensa el coordinador del departamento de inmunización y vacunación de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Thomas Cherian.
"No hay que confundir las cosas. No es que estas dos vacunas puedan usarse directamente en caso de que se declarara una pandemia y las necesitáramos, pero su concepción podría convertirse en la base de la eventual vacuna", aclaró Cherian.
"En caso de que se necesitara, el hecho de tener estas dos vacunas ya desarrolladas haría el proceso de producción de la vacuna contra el subtipo del N7N9 que afecta a los humanos mucho más fácil y rápido".
Cherian reiteró que la OMS no se plantea por el momento la posibilidad de pedir la producción de una vacuna, y que aún se analizan muestras de los afectados para conocer en profundidad el nuevo virus.
El vocero de la OMS, Gregory Hartl, indicó en un comunicado posterior que esta organización no se ha planteado aún la necesidad de producir una vacuna y el día que esa decisión se tome se hará por "consideraciones de salud pública".
La OMS informó la semana pasada que estaba enviando muestras a todos sus centros colaboradores para que se universalice la investigación.
Hartl agregó que los centros colaboradores de la OMS trabajan en la "creación de un virus para la vacuna" que "estará listo en unas semanas". "Actualmente, no se está produciendo ninguna vacuna para el H7N9", indicó.
Hasta el martes, el número de afectados había alcanzado 77, según el recuento diario que hace la Comisión Nacional de Sanidad y Planificación Familiar de China. Hasta el momento no se han detectado signos de que el virus se transmita entre humanos.
Muchos de los contagiados son personas que tuvieron contacto directo con aves, como una mujer que trabaja en un mercado con este tipo de animales y un hombre que se dedica a la crianza y venta de palomas.