¿Por qué somos tan suculentos para los mosquitos? Los 4 mitos más comunes
Casi todos pueden están de acuerdo en que los mosquitos son algo más que un poco molestos. Pican, su mordida molesta y el repelente apesta. Por si fuera poco, existen virus incurables que son contagiados por estos diminutos depredadores como el del Nilo Occidental , la malaria, la fiebre amarilla, la fiebre del dengue y el chikungunya .
Pero casi todo lo demás que creías saber sobre los mosquitos y sus mordidas puede ser erróneo.
Aquí están los datos detrás de cuatro mitos de los mosquitos para ayudar a prevenir la picazón y mantener tu salud:
Mito número uno: Todos los mosquitos pican a los humanos
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés), hay aproximadamente 3,500 especies de mosquitos. Algunos se alimentan de néctar de plantas, algunos de reptiles, algunos de aves y otros de mamíferos. De las especies que pican humanos, solo las hembras van por la sangre; la proteína ayuda en la producción de huevos.
La especie Aedes vexans se alimenta de humanos, lo que hace que parezca que todos los mosquitos te persiguen.
Para esta especie, “si eres un mamífero, estás en el menú”, dijo Joseph M. Conlon, un entomólogo jubilado de la Marina de Estados Unidos y un consejero técnico de la Asociación Americana de Control de Mosquitos.
Dato curioso: El mosquito que sale en Jurassic Park no habría mordido a humanos o a dinosaurios, dijo Conlon; es la única especie que no se alimenta de sangre.
Mito número dos: Los mosquitos son atraídos por ciertos alimentos, colores y tipos de sangre
Podrías haber escuchado que comer ciertos alimentos; como plátanos, cerveza y ajo, puede atraer o repeler a los mosquitos. Pero Conlon dijo, “nada que comas afecta tanto a los mosquitos”.
Puedes descansar con la certeza de que ponerte ropa oscura probablemente no atraerá a los mosquitos.
Y Conlon dijo que un estudio sobre la atracción de los mosquitos a la sangre tipo O fue refutado posteriormente debido a las malas estadísticas.
Harry Savage, entomólogo de investigación en los CDC, dijo que el dióxido de carbono y el calor son las mayores atracciones para los mosquitos. El aroma también puede jugar un papel. Los ingredientes en tu sudor y otras secreciones de la piel, que a menudo se determinan genéticamente, pueden hacer que una persona sea más atractiva a un mosquito que otra.
Ambos expertos concuerdan en que el tamaño importa en lo que se refiere a ser picado.
La evidencia sugiere que los mosquitos tienden a preferir a los hombres más que a las mujeres, a los adultos más que a los niños y a personas con mayor tamaño que a las más pequeñas. Conlon dijo que las figuras más grandes probablemente producen más calor, más dióxido de carbono y tienen mayor masa corporal para morder.
Mito número tres: El embarazo te pone en riesgo
Si crees que estar embarazada te convierte en un imán de mosquitos, no estás sola.
Un estudio publicado en 2000 respaldaba la creencia de que los mosquitos prefieren a las embarazadas.
Pero el estudio solo incluyó a 36 mujeres embarazadas y a 36 mujeres no embarazadas, y utilizó mosquitos nativos de Gambia, un pequeño país en África.
Conlon y Savage dijeron que el estudio podría ser válido, pero no por las razones obvias.
Las mujeres embarazadas emiten más calor y dióxido de carbono, que según nuestros expertos son atractivos para los mosquitos. Ponerse calientes y sudorosos, y respirar fuertemente después del ejercicio podría convertirte en un blanco de la misma manera que una futura mamá.
Mito número cuatro: Las plantas de citronela y las velas te protegerán
"La citronela es un repelente débil; el aceite. Tienes que aplastar las hojas”, dijo Conlon. ¿Esa planta de citronela en oferta en la tienda? No es tu mejor apuesta para prevenir las mordidas.
Las velas de citronela tampoco van a ayudarte mucho. Una brisa o cambio de la dirección del viento puede eliminar cualquier protección.
"Para mí, la citronela solo protege a la vela”, dijo Savage.
Conlon dijo que no se conoce ningún repelente efectivo por área. La mejor opción es un repelente registrado en la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA, por sus siglas en inglés) para utilizarlo en el cuerpo, como los productos que contienen el ingrediente DEET. La EPA tiene una herramienta en línea para encontrar productos que cumplen con sus estándares.
Conlon también advierte contra los productos naturales que afirman repeler a los mosquitos. “Realmente no hay ninguna presión evolutiva para producir un repelente (natural) para humanos. Solo somos otra fuente de proteína en este planeta”.