AT&T por su parte reportó un crecimiento casi nulo. En el primer trimestre de 2025, incrementó 3.8% su base de clientes de prepago, casi el mismo que obtuvo en el mismo periodo del año pasado que fue de 3.7%. Mientras que Telefónica, aunque no desglosa sus resultados operativos, especialistas prevén que también habría sufrido desconexiones considerables en el segmento.
Analistas consultados por Expansión coincidieron que por primera vez el esquema de recargas experimenta una caída generalizada entre los grandes operadores de telecomunicaciones, cuya situación estaría atribuida al entorno financiero que arrastra el país con un crecimiento económico prácticamente nulo, y una persistente inflación ubicada en 4.2% que obliga a los consumidores a priorizar sus gastos.
Daniel Hajj, CEO de América Móvil, concuerda con esta lectura. El directivo destacó que la compañía se ha percatado que los consumidores retrasan cada vez más las recargas telefónicas, ya que este modelo está intrínsecamente ligado a la economía.
“A veces compran una tarjeta de prepago con una validez de quince días y a veces recargan antes (para prever gastos). Pero también hoy en día, esperan uno, dos días o más para hacer una recarga y eso reduce nuestros ingresos”, detalló el CEO de la empresa en conferencia con analistas por motivo de sus resultados financieros.
El gasto promedio por usuario (ARPU, por sus siglas en inglés) al cierre del año pasado se ubicó en 81 pesos, pero en los primeros tres meses de 2025, descendió a 79 pesos, según datos de la consultora GloblalData. Este indicador permite medir el consumo que tienen los mexicanos, así como su poder adquisitivo.
“Por ahora no es una caída tan abrupta pero calculamos que si este año hay un menor crecimiento económico, el ARPU caerá un poco más”, advirtió Jesús Romo, director de investigación en la consultora GlobalData.
Los OMV, la opción en medio de la crisis económica
Los precios de los servicios de telecomunicaciones se han mantenido por debajo de la inflación hasta la primera quincena de mayo, según el último dato de Inegi, sin embargo, el aumento de este indicador a 4.2% provoca que otros productos de la canasta básica incrementen su precio, lo que supone un reto para que los mexicanos puedan destinar mayor presupuesto a la telefonía móvil.
En medio de esta fotografía, los analistas consideraron que los Operadores Móviles Virtuales (OMV), que compran servicios por mayoreo a las grandes firmas de telefonía para luego revenderlos al mercado con precios accesibles, se colocarán como una alternativa conveniente para una porción de consumidores que buscan opciones asequibles para acceder a servicios de conectividad. Esto en detrimento de las telefónicas tradicionales.
Las empresas telefónicas han integrado a sus paquetes de recarga la posibilidad de incluir servicios de streaming, a cambio de un monto extra. Telcel, por ejemplo, integró a esta estrategia con Amazon Prime Video con la finalidad de hacer más atractiva su oferta de recargas ante los OMV que cada vez ganan mayor terreno en el sector móvil.
Pero las tarifas se siguen colocando como el factor más relevante para el consumidor y será el determinante en el actual contexto financiero, de tal suerte que los OMV al contar con precios 30% más baratos que los jugadores tradicionales, sumado a los servicios de valor agregado que tiene cada una de sus recargas, se volverán más atractivos.
“El mercado del prepago es más competitivo y la satisfacción del cliente se vuelve en un factor importante para lograr su lealtad y más en un entorno complejo por la economía. Los operadores deberán esforzarse más para dar mayores valores agregados para que los usuarios vuelvan a voltear a verlos”, aseguró Romo.