Starlink tenía como plazo hasta el 30 de abril para presentar su data, al ser uno de los operadores sujetos a esta regulación por superar los umbrales de los lineamientos del acervo estadístico, como lo hacen los gigantes del sector: Telcel y AT&T.
Incluso el propio regulador detalló en su informe de datos oportunos del sector telecomunicaciones del primer trimestre que la empresa de Elon Musk no entregó la información. Starlink ahora podría ser acreedora a una multa económica que ascendería a 63.8 millones de pesos, según la aún vigente Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión (LFTR).
En el Capítulo II de la LFTR, dedicado a la sanciones en el sector, estipula que el IFT cuenta con la facultad para imponer multas de entre el 0.01% y el 0.75% de los ingresos de las compañías por incumplir o presentar de manera extemporánea, avisos, reportes, documentos o información que solicite el regulador como lo es la data para su banco de información.
Starlink durante sus cuatro años de operación en México ha entregado un solo informe al Instituto, el cual corresponde al segundo cuarto del año pasado donde reportó una facturación de 638 millones de pesos, de ahí la base de lo que implicaría la sanción económica, sin que hasta el momento exista una cifra oficial.
¿Procedimiento de sanción?
Desde la última entrega de datos, la compañía satelital hila tres trimestres sin reportar al IFT el estado de su operación en el país, cuya situación incluso podría derivar en un procedimiento de sanción más profundo.
Expertos consultados por Expansión explicaron que el incumplimiento de información por parte de Starlink califica para iniciar un procedimiento sancionatorio por parte del regulador de las telecomunicaciones, e incluso es probable que ya esté en curso.
Expansión indagó en el Registro Público de Concesiones (RPC) una posible sanción a Starlink, pero no se obtuvieron resultados. Además, este medio solicitó información al IFT sobre el tema, pero no emitió comentarios hasta la publicación del texto.
“Cuando se inicia un procedimiento de este tipo, el Instituto no puede decir nada al respecto porque la información es reservada”, puntualizó Fernando Borjón excomisionado del IFT y consultor en jefe en Access Partnership. “Pero en ese proceso la empresa tiene un plazo para presentar pruebas y defensa y el regulador debe valorar estos factores para determinar si procede o no una sanción, porque siempre debe respetarse el debido proceso”.
Starlink a pesar de regirse bajo la regulación del IFT, mantiene la política de las compañías de Musk: evitar la transparencia de sus estados financieros como operativos.
El IFT si mantiene un procedimiento de sanción, es probable que no pueda terminarlo debido a que está a escaso tiempo de desaparecer por la entrada de la nueva Comisión Reguladora de Telecomunicaciones (CRT), cuya entidad quedaría a cargo del proceso.