Mariah Carey reveló este miércoles que padece trastorno bipolar y que desde "hace poco" está en tratamiento pese a que la enfermedad le fue diagnosticada en 2001.
La cantante dijo que recibió el diagnostico tras ser hospitalizada después de un quiebre emocional y físico en 2001 cuando se estrenó su película Glitter, que fue duramente criticada.
"Vivía en la negación y el aislamiento, y con el temor constante de que alguien me expusiera", dijo Carey a People.
"Era una carga muy dura de llevar y simplemente no podía hacerlo más. Busqué y recibí tratamiento, me rodeé de personas positivas y volví a hacer lo que amo: escribir canciones y hacer música", agregó.
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Carey, que ha vendido 200 millones de copias a nivel mundial, dijo que estaba tomando medicación para el trastorno bipolar tipo II, que se caracteriza por alteraciones menos severas del estado de ánimo entre la depresión y la hiperactividad.
"Durante mucho tiempo pensé que tenía un trastorno del sueño grave. Pero no era insomnio normal y no me quedaba despierta contando ovejas. Estaba trabajando y trabajando y trabajando (...) Estaba irritable y temía constantemente decepcionar a alguien. Resultó ser que estaba experimentando una forma de manía", indicó la cantante.
En los últimos años, Carey atravesó una montaña rusa personal debido a su divorcio del comediante Nick Cannon, con quien tiene gemelos de 6 años, y un compromiso corto en 2016 con el empresario multimillonario australiano James Packer.