La industria y el entorno global frenan a la Fed
Las preocupaciones por el débil crecimiento del sector industrial y el golpe del entorno global a la economía estadounidense llevaron a la Reserva Federal a reducir su estimación de crecimiento para este año y a advertir un menor ritmo para la normalización de la política monetaria.
La mediana de las proyecciones de los miembros de la Fed mostró que el crecimiento de la economía estadounidense será de 2.2% en este año frente al 2.4% que proyectaban en diciembre de 2015, cuando el Banco Central elevó las tasas de interés por primera vez en casi una década.
“El panorama económico de Estados Unidos, aunque presenta una ligera mejoría con respecto a inicios de año, sigue siendo moderado”, dijo en entrevista la analista de Ve por Más, Dolores Ramón.
“Redujeron su estimado porque el sector industrial marca una desaceleración”, agregó.
Aunque la economía estadounidense ha presentado cifras positivas de empleo —en los últimos tres meses la economía ha creado en promedio 228,000 empleos—, el sector industrial, y en particular las manufacturas, han presentado caídas ante el golpe que representa un dólar más fuerte, una menor demanda global y el descenso en los precios de los commodities.
La actividad industrial retrocedió 0.5% en febrero de este año tras haber avanzado 0.8% en enero, aunque en el último reporte de la propia Reserva Federal destacó un modesto incremento de 0.2% en la actividad manufacturera tras un alza de 0.5% en enero.
“El punto es que la actividad manufacturera sigue débil, aún con algo de progreso en los últimos dos meses, y los datos de la producción industrial seguramente le darán a la Fed una pausa para elevar las tasas de interés”, dijo Chad Moutray, economista en jefe de la Asociación de Manufactureros Estadounidenses.
Menor ritmo para el alza de tasas
Los integrantes del Banco Central también pronosticaron que la tasa de interés de referencia se ubicará en 0.875% al cierre del año, lo que implica dos alzas de 25 puntos base durante 2016.
Se trata de una disminución frente al 1.375% que se pronosticó en diciembre del año pasado, que apuntaba a cuatro alzas en la tasa de referencia
“Este recorte en la previsión refleja que la Fed reconoce que sus proyecciones previas eran muy agresivas para una economía estadounidense con lento crecimiento”, dijeron analistas de Wells Fargo en un reporte.
Tras un agitado inicio de año marcado por las preocupaciones por la economía de China y la dramática caída en el precio del petróleo, los mercados pronosticaron que la Fed retrasaría la siguiente alza de tasas.
Las probabilidades para la reunión de marzo estaban prácticamente descartadas mientras que para la reunión de junio se ubican en 37.8%, un descenso frente al 56% de ayer martes, antes de que se conociera la decisión de la Fed.
Wells Fargo espera dos alzas en la tasa de interés en este año frente a su estimación previa de tres movimientos.