Las expectativas por el pacto petrolero en Doha se desinflan
La expectativa por la reunión que varios países petroleros sostendrán el 17 de abril en Doha, Qatar, para congelar su producción ha impulsado los precios del crudo en las últimas semanas, pero una recuperación más sostenida dependerá de una mayor demanda y de mayores recortes a la producción global.
El referencial West Texas Intermediate (WTI) ha ganado más de 17% desde inicios de la semana pasada ante la posibilidad de un acuerdo entre países miembros de la OPEP y otros productores como Rusia para congelar la producción a los niveles de enero de este año.
Sin embargo, el martes hubo dudas en el mercado tras declaraciones del ministro de Energía ruso, Alexander Novak, quien señaló que el pacto no incluiría grandes compromisos. Por ello, el WTI retrocedió 1.45% a 41.56 dólares por barril.
“Si el resultado de la reunión no confirma un acuerdo como el que la gente está esperando, los precios pueden volver a caer aceleradamente”, dijo a Expansión Tom Pugh, analista de commodities de Capital Economics.
Por el contrario, un acuerdo podría impulsar a los precios en el corto plazo pero no los elevará mucho hasta la segunda mitad de 2017 o la primera mitad de 2018, según un reporte de Oxford Economics.
Los observadores del mercado petrolero dudan que un pacto en Doha para congelar la producción pueda reducir significativamente el exceso de oferta en el mercado, que en este año puede llegar a 790,000 barriles por día, según estimaciones de la OPEP.
“Difícilmente, alguno de los países que asiste a la reunión tiene intenciones de aumentar su producción en primer lugar”, agregó Pugh.
Tan solo la Agencia Internacional de Energía espera un acercamiento al equilibrio entre la oferta y la demanda global de crudo durante el segundo semestre del año.
De acuerdo a un reporte presentado este jueves, el exceso de oferta pasará de 1.5 millones de barriles diarios en el primer semestre, a 200,000 barriles diarios en la segunda mitad del año, en el que contempla una caída de la producción petrolera de 700,000 barriles al día tan solo de países fuera de la OPEP.
Independientemente de ello, ya se prevé una menor producción de crudo este año aunque quizá no sea suficiente para rebalancear al mercado e impulsar los precios. La OPEP espera que los países que no son miembros del grupo produzcan un promedio de 56.39 millones de barriles por día, menor a los 57.13 millones de barriles por día que se produjeron en 2015.
En Estados Unidos es una situación similar: el gobierno espera que la producción del país promedie 8.6 millones de barriles por día en 2016, una caída frente a los 9.4 millones de barriles que se produjeron en promedio en 2015.
Sin embargo, esos recortes a la producción son todavía pequeños en comparación con la cantidad de petróleo estacionada en los inventarios, que en el caso de Estados Unidos aumentaron 6.6 millones de barriles en la última semana, una cifra superior al aumento de 1.9 millones de barriles que esperaban los analistas.
“En el corto plazo, los inventarios ganarán sobre los recortes de producción”, dijo en un reporte la firma de investigación Energy Aspects, con sede en Londres. Por ello, analistas encuestados por Bloomberg esperan que el WTI se ubique en 39.50 dólares en este año y que llegue a los 60 dólares hasta 2018.