Los encargos para el nuevo secretario de Hacienda
José Antonio Meade renunció como secretario de Hacienda y Crédito Público, y en su lugar Enrique Peña Nieto, presidente de México, designó en este cargo a José Antonio González Anaya, quien era director de Pemex.
En la toma de protesta, Peña Nieto encomendó a González Anaya dar balance a las finanzas públicas y garantizar el uso de recursos públicos para la etapa de reconstrucción tras los sismos de septiembre pasado .
nullPara dar balance a las finanzas públicas, el principal reto es lograr un superávit primario, es decir, alcanzar un índice positivo en la ecuación: ingresos del gobierno, menos gasto (sin considerar el servicio de la deuda).
Para este año el objetivo de este superávit es de 0.4% como proporción del PIB, pero puede incrementarse a 1.4%, si no existen imprevistos en el marco macroeconómico, refiere Hacienda en su último informe trimestral de las Finanzas y Deuda Públicas.
En lo que va de enero a septiembre este indicador representó el 2.0% del PIB.
Para 2018, se aprobó la meta de un superávit de 0.9% del PIB, este objetivo se logrará través de la contención del gasto programable, refiere el documento Criterios Generales de Política Económica aprobado por el Congreso.
El gasto programable, se refiere a los recursos que se destinan para proveer bienes y servicios públicos a la población, programas sociales y activos para la operación de las instituciones gubernamentales, refiere información de México Evalúa.
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La principal meta de lograr este balance primario, es mantener la calificación crediticia de BBB+, con perspectiva estable por parte de Fitch y Standard and Poor´s, mientras que Moody´s mantiene esta perspectiva negativa.
El reto de lograr este superávit se da en un contexto de baja de ingresos presupuestarios, por menores precios y producción de petróleo, y un menor crecimiento en los ingresos por impuestos.
También existe una mayor deuda pública en comparación con 2012, año en que inició la actual administración. Por igual prevalecen presiones por gastos obligatorios que son pensiones, servicio de la deuda y recursos a los estados, a través de participaciones.
En 2012, la deuda del sector público representaba el 34.3% del PIB, en septiembre pasado representó 44.2%. De acuerdo al Presupuesto 2018, se espera que los gastos obligatorios absorban 43% del gasto público total.
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También, hasta el primer trimestre del año, se esperan episodios de volatilidad por la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) , además una tasa de referencia de Banxico más alta en los últimos dos años.
Manejo de recursos para reconstrucción
La Secretaría de Hacienda tiene la batuta en el manejo de recursos para la reconstrucción después de los sismos de septiembre, principalmente de infraestructura pública como carreteras, puentes, caminos, monumentos, edificios históricos, zonas arqueológicas, y viviendas para personas de bajos recursos.
De acuerdo a información de Hacienda, del ejercicio fiscal 2017 existen recursos públicos de índole federal por 11, 266 mdp para la reconstrucción; 8,443 mdp por el Fondo de Desastres Naturales (Fonden) y 2,823 mdp del Bono Catastrófico del Banco Mundial.
Adicionalmente, con la aprobación del Presupuesto de Egresos de la Federación 2018 se contará con 28,394 mdp . El daño de los sismos se estima en 48,000 mdp, refiere Hacienda.