El ABC de una empresa social rentable
Los negocios sociales tienen un común denominador: resuelven una problemática social o ambiental. Estas iniciativas se gestan en la base de la pirámide que concentra a la población de menos recursos y su objetivo principal es dar solución a problema como la falta de educación, salud, vivienda o servicios públicos de poblaciones marginadas.
A diferencia de los negocios tradicionales que basan su modelo de negocio en alcanzar un beneficio económico a corto plazo, “los emprendimientos sociales miden su impacto en el alcance a gran escala que genera la solución social o ambiental que proponen”, explicó el coordinador de Ciudadanía Económica para Todos de Ashoka, Juan Carlos Bilbao.
En el pasado, los primeros negocios del sector financiero y maquila iniciaron con un objetivo social, pero “el modelo capitalista los obligó a maximizar utilidades y enfocarse a la repetición, provocando una crisis de los valores, recursos naturales y agudizando la pobreza”, explicó.
Expertos sugieren que es momento de que el emprendedor cambie su chip. Los nuevos emprendimientos deben voltear a ver oportunidades de mercado en las poblaciones vulnerables .
“Este sector de la población tiene poder adquisitivo y una alta demanda de productos que no satisfacen por completo sus necesidades básicas como educación, salud, vivienda, agua, energía y telecomunicaciones”, comentó la directora de Estrategia de Negocios de New Ventures, Ana Paula González.
Además los consumidores se han sensibilizado, están más informados y optan por adquirir productos que tengan detrás un impacto positivo en la sociedad o en el ambiente. Una tendencia que “genera intraemprendedores y redirecciona modelos de negocio tradicional”, dijo González.
Como todo negocio, estas iniciativas necesitan ser rentables y escalables en el tiempo y como primera palanca de crecimiento requieren también de recursos. Las fuentes de financiamiento como los fondos específicos y los inversionistas ángeles aún están en desarrollo.
“En el sector social, las campañas de crowdfunding se han convertido en la forma de financiamiento más popular para recaudar capital inicial”, aseguró la jefa de comunicación de Grameen Creative Lab, Christina Jäeger , una iniciativa de Grameen Bank, banco fundado por el premio Nobel Muahammad Yunus en Bangladesh.
Crowfunder México, Fondeadora , el Instituto Nacional del Emprendedor, la financiera Promotora Social México y los fondos como Ignia y Adobe Capital, así como organizaciones de vinculación y asesoría como Spectron Desarrollo y New Ventures impulsan estos modelos de negocio.
“Para acercarse a un inversionista es importante ilustrar paso a paso cómo la empresa social produce el impacto social deseado y proporcionar al inversor las métricas tanto cuantitativa como cualitativas con las que medirá el impacto social”, dijo Christina Jäeger.
Un buen emprendimiento social es aquel que demuestra un balance entre el retorno de inversión y su impacto social, ya que para atraer inversionistas también “deben demostrar que su modelo puede sostenerse de otras fuentes de financiamiento”, agregó Ana Paula.
Grameen Creative Lab recomendó hacer negocios sociales en sectores como microfinanzas, nutrición, sanidad y educación popular.