¿Qué sabemos y qué no sobre la liberación de las gasolinas?

¿Qué va a pasar con la liberación de los precios de las gasolinas en 2017? Esta semana tendremos más claridad sobre el tema, pues la Comisión Reguladora de Energía (CRE), el árbitro de este mercado, publicará un calendario de zonas donde iniciará la liberación en el precio del combustible en 2017, confirmó la dependencia a Expansión.

Sin embargo, incluso con ese calendario, aún faltarán cosas por conocer.

¿En qué ciudades se va a liberar la gasolina?

Lo que sabemos: la CRE pretende que las zonas fronterizas del norte del país sean las primeras en liberar el precio del diesel y la gasolina. Así que para inicios del año los estados de Baja California, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León, Sonora y Tamaulipas, pueden estrenar este nuevo modelo.

Lo que no sabemos: si la liberación de precios se hará extensiva en todos los municipios y ciudades de los estados de la zona fronteriza. Esto cinco estados son tan extensos, que la infraestructura para el suministro puede variar mucho entre un y otro en el mismo territorio.

Clave: los grandes volúmenes de gasolina se transportan a las llamadas Terminales de Almacenamiento y Reparto (TAR), así que estos puntos pueden servir de guía para conocer los costos de llevar el combiustible, y con esa referencia, se puede deducir las zonas que se van a liberar, así que en lugar de estados completos, se puede liberar zonas aledañas a las TAR.

¿Qué pasará si en mi ciudad no se libera?

Lo que sabemos: los precios van a seguir controlados por la Secretaría de Hacienda, aunque a diferencia de lo que sucede hoy, donde existe un precio común para todo el país y otro para los estados fronterizos, a partir de enero se hará de manera regional.

Lo que no sabemos: Hacienda debe presentar a más tardar el 31 de diciembre de 2016, porque a partir del 1 de enero entrará el nuevo esquema regulado, pues hasta el momento se desconoce la nueva fórmula.

Clave: aunque se desconoce la fórmula, la legislación pide que se replique “en la medida de los posible, las condiciones de las regiones en términos de logística”, según explicó la CRE, en respuesta vía correo electrónico. El regulador comenzará en el norte del país porque existe mayor infraestructura para transportar el combustibles, pues en varias zonas del país resulta insuficiente, lo que encarece su transporte y el precio al consumidor final, como ya lo hizo notar la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) a inicios de este mes.

¿La gasolina será más cara?

Lo que sabemos: ahora el precio está regulador por una fórmula establecida a inicios del 2016 que toma como referencia el costo promedio del combustible en la costa Este de Estados Unidos, los costos de logística, y los gastos de las gasolineras, además de los impuestos a los combustibles y el IVA. Además se fijó una banda que impedía que este valor subiera o bajara más del 3%.

En el primer semestre de 2016, la gasolina se ubicó en el piso de esta banda debido a que los precios en EU se encontraban muy bajos derivado de la caída de los precios del crudo; pero a medida que se recuperó el barril, el costo de la gasolina se incrementó, y los últimos meses de este año existe una diferencia de casi dos pesos, entre lo que cuesta un litro de gasolina sin el “estímulo fiscal” de Hacienda –un tipo de subsidio para los consumidores- y con esta ayuda.

Los expendedores de gasolina han advertido que esperan un alza en el precio de combustible al empezar 2017.

Lo que no sabemos: pero falta conocer cuáles serán las decisiones tanto de la CRE y Hacienda. El regulador tiene casi dos años para liberar el precio. En ese tiempo el costo del petróleo puede aumentar o bajar –se espera que suba-; se tienen proyectos para construir ductos y terminales de almacenamiento para beneficiar la importación; y entrarán nuevos jugadores al mercado, lo que debe apoyar a que el precio baje gracias a mayores eficiencias.

Clave: aquí lo importante es que la liberación detone las inversiones necesarias para cubrir las ineficiencias que Pemex ha dejado por décadas de monopolio en este sector; y eso puede costar mucho al principio, porque el trabajo hace falta mucho en almacenamiento y transporte de gasolinas.