La industria del cine, la gran olvidada en el TLCAN
A 15 días de que comience la renegociación del Tratado de Libre Comercio de Norteamérica (TLCAN), el tema del cine parece haber quedado excluido de la agenda.
El 11 de julio, la actriz Dolores Heredia, presidenta de la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas (AMACC), pidió al gobierno que establezca una mesa de diálogo con los miembros de la comunidad cinematográfica para crear una agenda de trabajo en defensa del cine mexicano, de cara a la renegociación.
“Estamos frente a la posibilidad de revisar, cancelar o modificar un tratado internacional de libre mercado, para cuya firma, hace más de 20 años, nuestra comunidad considera que no fue tomada en cuenta, y que llevó a que nuestro cine y nuestros imaginarios fueran marginados”, dijo Heredia durante la entrega de los premios Ariel.
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Heredia pidió una presencia más equitativa del cine mexicano en la relación comercial con Estados Unidos y mayores políticas públicas que defiendan su sector.
Expansión contactó a la actriz para profundizar en sus demandas pero no estuvo disponible.
Estar o no estar
El cine no tiene hasta el momento un capítulo en este tratado. De hecho, ni siquiera cuenta con un acuerdo bilateral en términos de producción o coproducción con Estados Unidos, destaca Alonso Aguilar, exdirector del Festival de Cine de los Cabos.
“No lo hubo nunca (un apartado). Hay muchos esfuerzos que vienen de ambos países, pero no se considera una coproducción oficial como quizás se considera con Francia o Argentina, con quienes tenemos tratados establecidos”, dijo Aguilar en entrevista.
En 2015, en México se realizaron 44 películas en coproducción internacional con la participación de 23 países, cinco más que el año anterior. En los últimos nueve años, el país con el que más se coproduce es Estados Unidos, seguido de España, Argentina y Colombia, de acuerdo con el Anuario Estadístico del Cine Mexicano que realiza el Instituto Mexicano de Cinematografía (Imcine).
El senador independiente Armando Ríos Piter también considera que esta industria del cine, junto con la del maíz, en la parte agroalimentaria, deberían de tener sus propios apartados en el nuevo tratado.
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“Hay que buscar que el cine mexicano tenga igual apertura en cuanto a salas que el de Estados Unidos”, dijo en entrevista.
En México, la industria cinematográfica ha crecido siete veces por encima de la economía nacional, según el Imcine.
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Sin embargo, Aguilar opinó que impulsar esta industria no es un tema de leyes o tratados. “Yo creo que el cine no es institucional, no es a través de reglas, se define por su calidad, México tiene talento de sobra para irse a sentar en las mesas más competitivas del mundo y proponer talento, narrativas, actores, directores. Yo no voy a dormirme en los laureles y pensar que, al menos que haya un tratado que nos proteja, no vamos a poder despegar. Para mí es una mentalidad tercermundista”, añadió Aguilar.
Aguilar puso como ejemplo la alianza entre productoras como Fábula (Chile), Dinamo (Colombia) y Canana (México), de Gael García Bernal, Diego Luna y Pablo Cruz, que busca impulsar un 'pool' latino en Hollywood. “Lanzaron juntos una plataforma en común en donde se comprometieron a hacer una bolsa grande dinero para generar una serie de películas con cada uno de estos distintos socios, y de ahí salieron joyas maravillosas”.
