Heineken planeó producir agua en vez de cerveza en caso de desastre desde 2014
Tras el sismo registrado el pasado 19 de septiembre, diversas empresas comenzaron a realizar donativos o iniciativas para apoyar a los damnificados. Algunas de las compañías ya estaban preparadas para un evento así. La respuesta inmediata por parte de Heineken CM, por ejemplo, se debió a un plan para este tipo de desastres que elaboró desde 2014.
La cervecera, a través del área de sustentabilidad y responsabilidad social, desarrolló un proyecto para abastecer de agua potable enlatada, producidas en su planta de Orizaba, en Veracruz, a comunidades afectadas en casos de desastres naturales.
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"Nos dimos cuenta de que el agua potable es una de las solicitudes más frecuentes en caso de desastres. Por ello, decidimos iniciar la producción de agua enlatada en nuestra planta de Orizaba, que es la número uno a nivel mundial en uso eficiente de agua”, cuenta Dolf van den Brink, CEO de Heineken CM México.
En 2015, Heineken CM puso en marcha los recursos adecuados, capacitó al personal de la planta para poder enlatar agua potable, y un año después realizó la primera producción de 50,000 latas, que alcanzaría las 70,000 latas este año, que se distribuyeron en diferentes zonas del país.
“Desde el primer sismo del 7 de septiembre, comenzamos a enviar la producción que teníamos a las zonas afectadas por ese evento natural”, agrega Van den Brink. "No obstante, con el sismo del 19 de septiembre decidimos parar la producción (de cerveza) en Orizaba para elaborar un millón de latas con agua y hacer frente a la nueva contingencia, que llegó a entidades como la Ciudad de México, Estado de México, Puebla y Morelos".
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El 20 de septiembre, sólo un día después del sismo, la empresa distribuyó las primeras 100,000 latas en Oaxaca, Ciudad de México, Morelos y Puebla, en coordinación con la Cruz Roja y Protección Civil. Esta semana continuará con la repartición de 1 millón de latas más.
“A lo largo de los 128 años que tenemos de existir en México, hemos apoyado constantemente a comunidades necesitadas ante desastres, y fue en este contexto como se concibió el proyecto de enlatar agua. Buscamos estar siempre preparados con un inventario de agua en nuestros almacenes, para apoyar de forma inmediata ante un desastre, y fue esto también lo que nos permitió tener la capacidad para detener nuestra operación de cerveza en Orizaba”, destaca Van den Brick.