Pemex consigue dos socios en tierra, pero nadie en el mar
La firma de origen egipcio Cheiron será el nuevo socio de Pemex en el bloque petrolero Cárdenas-Mora, luego de presentar la mayor de las dos ofertas presentadas en la licitación de los farm-outs (asociaciones) para trabajar con Pemex.
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La empresa ofreció el máximo porcentaje de participación para el Estado, 13%, y un pago en efectivo de 41.5 millones de dólares, con lo que superó al consorcio canadiense-mexicano Gran Tierra México Energy y Sierra Blanca.
La compañía, que pertenece a la petrolera egipcia Pico Cheiron Group, se especializa en la revitalización de campos maduros (aquellos que ya han superado su pico de producción) y tiene participación en un campo en Altamira, en el norte del país, bajo un contrato incentivado.
nullEl bloque, conformado por los campos Cárdenas y Mora se encuentra en Tabasco y forma parte de la provincia petrolera Cuenca del Sureste. Los campos se descubrieron en 1980 y se encuentran en producción en la actualidad. Sin embargo, para que alcancen todo su potencial Pemex necesita socios, por lo que se pusieron a licitación.
Y otro socio más
Además, la petrolera alemana DEA Deutsche Erdoel se llevó la última licitación para asociarse con Pemex, luego de pagar 213.8 millones de dólares, y vencer así a su más cercano competidor, el consorcio de California Resources Corporation y la mexicana Petrobal, del empresario Alberto Baillères.
DEA Deutsche ganó el tercer contrato para asociarse con Pemex de los tres farm-outs ofertados este miércoles, en el campo Ogarrio.
La petrolera alemana había ganado ya un bloque en la Ronda 2.1 en asociación con Pemex a mediados de este año, aunque en una relación contractual distinta a la del farm-out. La compañía tiene presencia en Dinamarca, Egipto, Noruega y Alemania.
El campo Ogarrio se encuentra en Tabasco, en la provincia petrolera de Cuenca del Sureste. Este bloque, descubierto en 1957, se encuentra en producción.
Fracaso y aprendizaje
En cambio, Pemex no logró seducir a las empresas privadas para que se asociaran en el campo Ayín-Batsil, un campo en aguas someras en el Golfo de México, donde pedía una inversión adelantada de 250 millones de dólares a su posible compañero.
"La competencia ha dictado su propia opinión. Y a partir de este aprendizaje nosotros, esperamos que en la siguiente ronda se vuelva más competitiva la posición de nuestra empresa nacional", dijo el subsecretario de Hidrocarburos de la Secretaría de Energía, Aldo Flores, en una conferencia de prensa posterior al proceso.
La compañía deberá replantear los términos del contrato para re-licitar el campo de Ayin-Batsil, que tiene un gran potencial, dijo el director general de Pemex, José Antonio González Anaya.
"Entendemos parte de las razones. Es un campo complicado, aunque formalmente se declare en aguas someras, son un poco más profundas que estas y requiere de tecnología que ya es de aguas profundas", explicó el funcionario.
El directivo incluso culpó en parte a las consecuencias que vivieron las empresas petroleras en Houston a inicios de septiembre con el impacto del huracán Harvey, lo que pudo retrasar los trámites para participar.
Pemex recibirá cerca de 530 millones de dólares (mdd), entre los diferentes bonos que pagaron las compañías que se llevaron los otros dos campos, explicó el comisionado presidente de la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH), Juan Carlos Zepeda. El Fondo Mexicano del Petróleo se llevará otros 30 mdd.
Pemex también evaluará la posibilidad de cambiar la forma en que presenta sus propuestas para licitar estos farm-outs, y aseguró que en 2018 acelerará estos procesos. Hasta ahora sólo ha colocado 3 bloques —uno en aguas profundas con la australiana BHP Billiton, y estos dos en tierra— de un ambicioso plan para colocar decenas de campos en este tipo de acuerdos en los siguientes dos años.